Vecinos del barrio Toba denuncian fuerte represión policial

De acuerdo con la versión de quienes viven en la zona, los agentes llegaron en unos 10 patrulleros para desalojarlos de un terreno en el que se habían comenzado a instalar el día anterior. Dijeron que hubo balazos de goma, golpes, discriminación y detenidos.

Vecinas y vecinos del barrio Toba en la zona sudoeste de Rosario denunciaron este viernes que fueron blanco de un operativo represivo por parte de agentes policiales que, según dijeron, les tiraron con balas de goma, los golpearon, le quebraron una pierna a un vecino y los desalojaron de un terreno.

De acuerdo con el relato que dieron a El Ciudadano, este jueves alrededor de 350 familias intentaron instalarse en las tierras linderas al barrio de Roullion y Aborígenes Argentinos que pertenecen al ferrocarril, porque no aguantaban más vivir en condiciones de hacinamiento.

“En mi casa somos 10 personas en dos cuartos. Nos habían dicho que esa tierra no tenía dueño. Cuando nos instalamos los policías nos empezaron a discriminar, a decir sucios, mugrientos, negros de mierda”, contó una vecina que nació en el barrio Toba.

Emiliano Calcagno, referente de la organización Cuba-MTR que trabaja en el barrio, agregó: “Hay un problema habitacional en esta zona, con cinco familias conviviendo en una casa. Con la pandemia estas malas condiciones se profundizaron a lo que se agrega el riesgo sanitario. No queremos ser una Villa 31”. En el operativo ordenado por el fiscal provincial Adrián Mc Cormack hubo dos hombres y una joven detenidos, informaron los propios vecinos.

El operativo fue en el mediodía de este viernes y, siempre según el testimonio de vecinos y vecinas, involucró a unos 10 patrulleros. En diálogo con El Ciudadano, una vecina que pidió reserva de identidad contó que decenas y decenas de familias fueron al terreno este jueves por la tarde y se quedaron hasta la noche.

“Volvimos hoy (este viernes) a las 8 y nos dijeron que nos teníamos que ir, algo que podemos entender pero no que nos discriminen y nos digan que somos unos mugrientos y unos negros de mierda. La gente se defendió y respondió, no tienen derecho a basurearnos así. Nos empezaron a reprimir, corriendo a los chicos por los pasillos. Yo me tuve que meter en la casa de una vecina”, dijo y agregó que durante el operativo a un joven le quebraron la pierna: “Ni siquiera estaba en los terrenos”.

La vecina explicó que en la zona hay muchos problemas de vivienda. “Hay mucha gente viviendo en el barrio en una sola casa, 20 personas. La gente necesita el terreno para levantar una casa. Y esas hectáreas están desocupadas desde siempre”, contó.

Calcagno, de la organización Cuba-MTR, agregó que el problema habitacional del barrio aumentó con la pandemia. “No puede haber cinco familias en un casa con lo que pasa con el coronavirus. Las familias fueron ayer de manera espontánea porque no aguantan más el hacinamiento. Hay una necesidad y está al alcance de la mano resolverla porque esos terrenos no los usa nadie”, dijo Calcagno, quien contó que dos personas siguen detenidas, un hombre y una joven, que milita en la organización.

“Hay un pibe que la Policía le quebró la pierna, lo llevaron al hospital. La compañera que llevan detenida fue molida a golpes. Hubo al menos tres heridos”, dijo Calcagno.

Este viernes a las 19.30 vecinos y vecinas concentraron en Roullión y Aborígenes Argentinos para denunciar públicamente el hecho en una conferencia de prensa.

Trabajo en el barrio contra la violencia institucional

Según pudo saber El Ciudadano, la Agencia de Control de Policial no recibió ninguna denuncia aún sobre la actuación de la Policía en el barrio Toba. Desde la entidad que reemplazó a lo que era Asuntos Internos, iniciaron hace poco un trabajo en la zona a partir del llamado de un referente barrial que advertía sobre distintos casos de violencia institucional, tanto de años atrás como recientes.

Este mismo jueves los agentes estatales habían visitado el barrio del sudoeste para hablar con vecinas y vecinos. Les dijeron que hay un compromiso por parte de la gestión del Ministerio de Seguridad para ir a fondo con los casos de violencia institucional. Una de las cosas que remarcaron es que no es necesario que se acerquen al centro de la ciudad a denunciar, sino que podrán contar con que personal de la Agencia esté en el territorio para tomar las denuncias.