Ánimos caldeados

En el socialismo resulta casi indiscutida la postura de que la dupla Bonfatti – Lifschitz se repartirán los territorios en el 2019.Lifschitz afronta un duro e impensado conflicto gremial mientras intenta impulsar la reforma de la Constitución. El peronismo se opone mientras ojea candidatos.

Un empresario radical, racional pensador de la vida política argentina, Miguel Peralta, suele hacer una libre interpretación analógica del proceso histórico nacido en 1945 con la irrupción – y disrupción – del «peronismo» , que convergió básicamente en una idea- doctrina más bien corporativa antes que partidista, con el «Cambiemos» del Macri – duranbarbismo que un siglo después, de la misma e «invisible» manera crea nuevos paradigmas en la vida política nacional.

El socialismo lo advirtió, y quiere enfrentar al macrismo con lo que ellos pregonan debe ser «la alternativa progresista» nacional el año que viene. ¿Llegarán a tiempo cuando, según la oposición PRO y peronista, corren riesgo de perder el «banco de pruebas» que fue – y es – la Provincia de Santa Fe?.

En el último Congreso del socialismo llevado a cabo este fin de semana en Rosario, su presidente Antonio Bonfatti siguió la línea discursiva de Miguel Lifschitz el 23 de febrero también en Rosario: “Tenemos que construir una alternativa diferente, sin deshonestos y sin la derecha, debemos convocar a los argentinos a tener políticas de Estado, tenemos que ser protagonistas en 2019, estoy seguro que una compañera o compañero va a encabezar este proyecto», concluyó el presidente del PS», arengó.

El jefe de la bancada de Diputados del PRO Nicolás Massot, creyendo que estaban fuera del aire en un programa de TV abierta, pronosticó que «nosotros» , ¿Cambiemos ó el PRO?, se quedarían una década más en el poder hasta que inexorablemente llegase «un peronismo reciclado». Para muchos radicales, Massot los ninguneó otorgándoles un rol secundario en la coalición gobernante.

«Ningún proceso político dura solo cuatro años», suele filosofar el diputado Rubén Galassi, otorgándole indirectamente la derecha a Massot en el sentido de la perdurabilidad gubernamental; aunque también aclara que en Argentina todo es posible. ¿Como la llegada a la nación del progresismo alfonsinista «reciclado» el año que viene de la mano de Lifschitz o Bonfatti?.

En el socialismo resulta casi indiscutida la postura de que la dupla Bonfatti – Lifschitz se repartirán los territorios en el 2019.

Huelgas y reforma constitucional

El embate final del Gobernador Miguel Lifschitz procurando consensuar con distintos sectores políticos la reforma de la Constitución provincial antes de enviar el mensaje de necesidad de la reforma al parlamento – sino lo hará igual – se topó con un inesperado paro de los gremios estatales que rechazaron la oferta salarial propuesta por el gobierno en paritarias: 16,1% de aumento en tres tramos (7% a abonarse en el mes de marzo, 4% para el mes de julio; y el tercer tramo de 5% para el mes de octubre) con «cláusula gatillo».

No le llamó la atención al gobierno la dura posición docente; suele ser siempre así. Lo que asombró es el paro de los sindicatos UPCN y ATE conjuntamente con los docentes para este martes y miércoles.

Salvo que existan soterradas negociaciones políticas entre el gobierno y éstos sindicatos – descreemos de UPCN- para exponer al gobierno nacional, resulta inaudita la poca paciencia que esta vez tuvieron ATE y UPCN, quienes nunca llamaron a un paro sin antes agotar todas las instancias de negociación. Máxime cuando sus pares están cerrando paritarias del 15 % en el resto de las Provincias (cuyos salarios no son mejores que en Santa Fe, sino todo lo contrario).

La experiencia dicta que el día 20 se liquidan los sueldos, y los primeros días de abril los empleados públicos quieren cobrar con aumento, lo cual les mete presión a las dos partes. Seguramente el gobierno tendrá que aumentar el porcentaje de marzo y acortar a dos los tramos – supuesto que ya descartaron de plano desde el gobierno- . Y hacer un esfuerzo adicional.

¿Demorará la huelga estatal de gremios peronistas la intentona reformista de Lifschitz?. El Partido Socialista dio – como no podía ser de otra manera – el puntapié inicial con un documento mediante el cual apoyan la reforma constitucional de Miguel Lifschitz; el resto de los suscribientes del FPCyS lo están imitando. Salvo la UCR que, al decir de su presidente Julián Galdeano, «no vamos a firmar un cheque en blanco sin antes conocer – y debatir – los puntos de coincidencias de la reforma».

Galdeano se cuida de fijar posición personal sobre la modificación del Capítulo 1, Art. 64: «EL gobernador y vicegobernador duran cuatro años en el ejercicio de sus funciones, sin que evento alguno autorice prórroga de ese término, y no son elegibles para el mismo cargo o para el otro sino con intervalo, al menos, de un período». En criollo básico: reelección de Lifschitz. Sabe Galdeano que su Partido es un avispero; cualquier movimiento brusco lo tornaría peligroso.

Por un lado el sector mayoritario NEO avala lisa y llanamente reelección de Miguel Lifschitz (con primarias en el FPCyS); pero hay un sector – Grupo Universidad- liderado por el intendente de Santa Fe con pretensiones gubernamentales José Corral, que no quiere saber nada, siquiera con reformar la Constitución: «El gobernador Lifschitz tiene ilusiones de reelección, pero tiene que entender que los problemas de la gente son otros y no los de la reforma», asestó Corral en idéntica coincidencia con los postulados del peronismo.

Precisamente, el senador peronista Danilo Capitani pidió «no insistir este año con una reforma constitucional; mucho de lo que se quiere cambiar se puede hacer por ley», señaló el galvense enrolado en las filas de la supuestamente futura precandidata María E. Bielsa.

Omar Perotti se cura en salud y mandó a su diputado provincial Roberto Mirabella a ingresar un proyecto de Ley proponiendo un plebiscito vinculante (discutido constitucionalmente) para que el año que viene, conjuntamente con las elecciones provinciales, la ciudadanía se exprese sobre la reforma constitucional con reelección.

El presidente del PJ Ricardo Olivera deja supeditado al Consejo Ejecutivo la decisión orgánica de avalar o no la reforma constitucional. Sin el voto de los senadores peronistas, Miguel Lifschitz no podría ver cumplido su anhelo. Si alguno de los representantes departamentales se desmarcara de la decisión partidaria sería considerado poco menos que un acto de traición, merecedor de la expulsión sin más atenuantes.

¿De cuánto es la deuda?

A tres semanas del vencimiento del plazo pactado con la nación en el Consenso Fiscal firmado en noviembre último, el gobierno central le informará esta semana personalmente al Gobernador Miguel Lifschiz de cuánto es la actualización calculada de los 23.500 millones de pesos históricos que la Nación le debe a la Provincia de Santa Fe por la detracción indebida durante casi una década del 15% de su coparticipación para el Ansés y la AFIP.

El Ministerio de Economía de Santa Fe hizo su propio cálculo el año pasado: casi 50 mil millones de pesos ($ 49.840.873.014) y le sugirió al gobierno de Macri una posible forma de pago: 15 mil millones de pesos en 24 cuotas mensuales, iguales y consecutivas de $ 625 millones, cifra que automáticamente se coparticipará en un 13,4% a los municipios y comunas. Los 34.480 millones restantes mediante la emisión y entrega de títulos públicos nacionales que deberán pertenecer a especies con alto volumen de circulación en el mercado internacional, con períodos de amortización de hasta 40 años. Estos títulos también serán transferidos de manera coparticipable a los municipios y comunas.

Mientras tanto, Lifschitz logró que el parlamento le aprobara la toma de un empréstito de 300 millones de dólares (seis mil millones de pesos) que solo pueden utilizar para pavimento en pueblos y ciudades. $3.143 millones irán no reembolsables a los 363 municipios y comunas como adelanto de la coparticipación del pago de deuda de Nación; y lo restante como préstamos, también a los municipios y comunas. Todo bajo la supervisión de una comisión que se creó integrada por 2 senadores y 2 diputados, más el Poder Ejecutivo.

Santa Fe en una lista internacional

El postulante a diputado para el parlamento italiano en las elecciones del pasado domingo 4 de marzo por el USEI, el santafesino Dino Novello pese a su muy buena performance no logró acceder a un escaño. Novello de esta manera y merced a su destacado debut electoral, a pesar de los serios inconvenientes registrados en la distribución de los votos por parte del Correo Argentino, logró convertirse en uno de los principales referentes del USEI en nuestra Provincia y seguramente en el país.

Finalmente fue el líder del USEI (Unión Sudamericana de Emigrantes Italianos), el ítalo argentino Eugenio Sangregorio quien logró acceder a una banca de diputado en el parlamento italiano por la circunscripción latinoamérica en las elecciones generales que tuvieron lugar el pasado domingo 4 en Italia, junto al candidato a Senador Adriano Cario.