En 2018, los subsidios a la energía subieron 45,5 por ciento

Superaron ampliamente la evolución de todos los demás componentes del gasto corriente. Es el primer año con una baja en dólares.

Los subsidios corrientes a la energía crecieron 45,5% en pesos durante 2018 gracias a un aumento del 310% de los subsidios corrientes a la ex Enarsa y del 154,6% al Ente Binacional Yaciretá. Sin embargo, por la fuerte devaluación, fue el primer año en una década que se redujeron los subsidios medidos en dólares. En términos reales la caída fue del 1,4%.

Por el contrario, las transferencias de capital a energéticas cayeron 41,6% en pesos en 2018. De esta forma, la totalidad de la asistencia al sector trepó un 34,2% interanual, según informó el Informe anual de Hidrocarburos del Instituto Mosconi a partir de datos de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP).

En consecuencia, los giros al sector se ubicaron ligeramente por encima del 33,5% de inflación promedio de 2018 -a diciembre la inflación trepaba al 48,5% interanual- y también por encima de lo que sucedió con el promedio del gasto público primario, que en el transcurso del año tuvo un aumento del 22,4%. Por ejemplo, las remuneraciones subieron 31,1% y las prestaciones sociales 27,7%. De los grandes conceptos que componen el gasto corriente solo los intereses de deuda (70,4%) subieron más que los subsidios corrientes a las energéticas.

Hace más de una década que año tras año se observa que los subsidios al sector crecen, la novedad es que en 2018 el aumento en pesos se tradujo en una caída en dólares.

Al analizar el destino de las asistencias corrientes al sector – que ascendieron $186.294 millones el año pasado-, el 55% del total fue a Cammesa, lo que significó un aumento del 36,9% respecto del monto que había recibido en 2017. Y el 28% del total fue a Enarsa -que a mitad de año se fusionó y pasó a llamarse Ieasa-, que recibió un 310% más en pesos que el año previo.

En tanto, el aumento de las transferencias a la ex Enarsa medido en dólares fue del 177,5%, para afrontar la importación de combustible. Esta fuerte suba contrasta con la importante baja que implementó Macri en 2016. En total, la compañía recibió $ 51.450 millones (1.970 millones de dólares). De todos modos, «los subsidios reales a Enarsa se encuentran por debajo del promedio histórico siendo éste de USD 2.250 millones entre 2007-2018», precisó el reporte.

Por su parte, el monto de subsidios para el Programa de incentivos a la producción de gas natural -ex Plan Gas – registró una caída del 20,5% en pesos y del 46,2% en dólares. En la comparación con 2016, la caída asciende al 54% en pesos y al 75,3% medido en dólares.

«El programa se presenta como el tercer beneficiario en importancia dentro de los subsidios económicos con un peso del 10,5% sobre el total. A su vez, desde su implementación en el año 2013 este ítem creció a una tasa promedio anual de 25,7%. El Plan Gas recibió USD 3.035 millones durante 2016, USD 1.393 millones durante 2017 y USD 750 millones en 2018 medido en dólares reales a moneda de diciembre de 2016, reduciéndose en el último año 46,2% en términos reales. Estos datos muestran que los beneficiarios recibieron un total acumulado de USD 5.177 millones en términos reales durante los últimos tres años», precisó el informe del Instituto que dirige Jorge Lapeña.

El aumento de los subsidios para atender erogaciones corrientes se vio compensado por la caída de las transferencias de capital para inversión en el sector, en línea con lo ocurrido con la inversión real directa pública del Estado nacional, que cayó 17% en términos reales (solo subieron 10,7% en pesos).

En efecto, las transferencias de capital totalizaron $ 11.112 millones en 2018, siendo 41,6% inferiores a las del año anterior medidas en pesos. «En este caso, todos los beneficiarios recibieron menos transferencias que el año anterior. Particularmente, ENARSA (actual IEASA) recibió 73% menos de recursos que el año anterior», detalló el informe. (La Politica Online)