Piden condenas para el cuñado y la hermana de Esteban Alvarado

El fiscal solicitó diez años para Fabricio Lorincz y siete para Yanina Alvarado, familiares de Esteban, acusado del crimen de un prestamista.

El fiscal federal Federico Reynares Solari requirió ayer condenas de 10 y 7 años de prisión, respectivamente, para Fabricio Lorincz y Yanina Alvarado, quienes son juzgados como integrantes de una estructura que comercializaba drogas en la zona oeste de Rosario. Los juzgados son el cuñado y la hermana de Esteban Lindor Alvarado, un hombre que nunca fue acusado en causas de drogas en Rosario, pero que es mencionado hace años por dedicarse a este negocio, y que está detenido desde febrero acusado de ser ideólogo del asesinato del prestamista Lucio Maldonado.

Los hechos que motivaron este proceso por narcotráfico, en el que son juzgadas diez personas en total, fueron investigados en el año 2014. El juicio se inició hace tres semanas y despertó atención a raíz de hechos recientes. Ocurre que Yanina Alvarado es hermana de Esteban Alvarado, quien desde noviembre quedó en el centro de la atención de las autoridades de seguridad provincial, al detectarse que en una casa de su propiedad en la zona de Piñero estuvo retenido el prestamista Lucio Maldonado, dos días antes de que encontraran su cuerpo sin vida con tres balazos cerca del Casino City Center.

Esta causa llegó a juicio oral después de que se frustrara un procedimiento abreviado que iba a ser el 4 de diciembre pasado por el Tribunal Federal Oral 3, pero una de las partes decidió dar marcha atrás por lo que hay audiencias orales en Oroño al 900. «Creemos que las novedades relacionadas con una causa ajena a esta impidieron avanzar con el acuerdo abreviado. Lo que queda claro es que no se probó una sola vinculación de Esteban Alvarado con los hechos de este trámite», dijo Fernando Arias Camaño, que representa a Lorincz y Yanina Alvarado, por quienes alegará el jueves próximo.

La semana pasada Lorincz asumió ser un vendedor de estupefacientes pero aseguró no ser parte de ninguna organización. Incluso despegó a su pareja, Yanina, del grupo enjuiciado. Durante la audiencia, el hombre aseguró que su esposa estaba incorporada al negocio porque él se lo exigía.

A la par

El fiscal Reynares Solari rechazó ayer estas versiones. A su criterio los elementos de investigación, especialmente las interceptaciones telefónicas, evidencian que Lorincz y su mujer trabajaban en pie de igualdad, y que ella conocía la actividad de su marido.

La pena de 10 años a Lorincz tiene como base el hecho de que para el fiscal se constató que controlaba varios puntos de venta con varias personas trabajando allí en su provecho. En las transcripciones queda en evidencia, sostuvo el acusador, que Lorincz era el jefe de Gustavo Ramírez, otro de los juzgados, para quien pidió ocho años de prisión. Lorincz y Yanina Alvardo apresados los tres en una casa de la zona de Cerrito al 1500 en diciembre de 2014.

En otros domicilios allanados y vinculados con la pareja, uno en Cochabamba al 6800, se secuestraron diez kilos de marihuana en ocho panes y 228 gramos de cocaína. En dicha vivienda también se secuestraron once teléfonos celulares y una importante suma de dinero. Esa propiedad, estableció al procesarlos el juez federal Carlos Vera Barros, pertenecía a Lorincz pero se encuentra a nombre de su pareja. Ramírez, en tanto, fue detenido en Facundo Quiroga al 400 de Roldán en donde, según establece el juez, se produjo el secuestro de casi un kilo de marihuana.

Al ser detenidos, Alvarado y Lorincz fueron señalados como integrantes de una cadena de comercialización de cocaína y marihuana con dos líneas de distribución. «Una de las líneas se dedicaba principalmente al comercio de drogas sintéticas como LSD, éxtasis y ketamina y estaba a cargo de Miguel Angel Lotufo. Y la otra, que traficaba cocaína y marihuana, era manejada por Gustavo Ariel Ramírez», señaló al acusarlos el fiscal federal Mario Gambacorta.

Ayer el fiscal Reynares pidió 6 años y medio de prisión para Lotufo al valorar que la evidencia en su contra no permitía acusarlo de organizador que es un delito más grave. Para los restantes detenidos requirió penas de entre dos años en ejecución condicional y seis años.

Reynares Solari también pidió, al final de su alegato, que se investigara a miembros de una familia de apellido Villalva de la zona oeste de Rosario. Eso se debe a que las escuchas de la investigación revelan que Ramírez mantiene una diferencia con unos presuntos distribuidores de apellido Villalva que afirmaban que ellos venden droga para Alvarado. Como para zanjar ese pleito Lorincz le pidió a Ramírez que le diga a los Villalva que «a vos te banca el cuñado del Esteban», como se lo conoce a Alvarado. (La Capital)