Ola de gripe: Qué es lo que hay que tener en cuenta para no enfermarse

Desde el Ministerio de Salud de la provincia se advirtió sobre un aumento de la demanda de atención en los servicios de guardia e internación debido a los cuadros invernales.

Desde el Ministerio de Salud de la provincia se advirtió sobre un aumento de la demanda de atención en los servicios de guardia e internación debido a los cuadros invernales. Según se indicó, se detectó la circulación de los virus sincicial respiratorio, VSR y gripe en dos de sus tres variedades (H3N2 y H1N1), también bacterias como el neumococo. Para evitar enfermarse es fundamental cuidarse del frío, vacunarse y extremar la higiene de manos y del hogar. Ante síntomas como fiebre alta, respiración con pausas y agitación, palidez, decaimiento importante, mucho sueño, falta de apetito o vómitos, hay que consultar al médico.

Las autoridades sanitarias recordaron que las principales medidas para no contraer gripe son cubrirse la boca con un pañuelo o con el brazo al toser o estornudar; lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón y secarlas con una toalla de papel, en caso de que no haya disponible ni agua ni jabón puede usarse un desinfectante como alcohol en gel; mantener la limpieza de superficies y objetos que se tocan a menudo, como escritorios, mesadas, picaportes, teclados de computadoras, artículos de aprendizaje práctico, manijas de canillas y teléfonos; usar productos de limpieza y seguir siempre las instrucciones de las etiquetas y ventilar los ambientes una vez por día sobre todo en días soleados.

Además señalaron que la vacuna antigripal es gratuita, está disponible en hospitales y centros de salud y es necesaria recibirla todos los años, debido a que el virus de la gripe cambia y las defensas no se mantienen más allá del año.

Deben vacunarse contra la gripe el personal de salud de efectores públicos y privados, embarazadas y puérperas los diez días posteriores al parto, si no fueron vacunadas durante el embarazo; niños de 6 a 24 meses, que requieren dos dosis separadas por un mes y mayores de 65 años.

Además, los niños, adolescentes y adultos que presenten factores de riesgo por problemas genéticos, musculares o del desarrollo graves; severos trastornos respiratorios; problemas cardíacos; diabetes o insuficiencia renal crónica; alteraciones en las defensas por VIH o medicación; enfermedades onco-hematológica y tumorales, y trasplantados; obesidad importante; retraso madurativo grave y síndromes genéticos, enfermedades neuromusculares con compromiso respiratorio, y también malformaciones congénitas de carácter grave; convivientes de enfermos oncohematológicos y de prematuros extremos (menores de 1500 gramos) para evitar contagiar a sus contactos. (La Capital)