Newell’s cayó ante Racing y suma incertidumbre

Newell’s perdió 1 a 0 ante Racing en un cotejo en que la diferencia estuvo marcada en las áreas, donde la Academia mostró su mayor jerarquía y contundencia ante un equipo rojinegro que estuvo en varias ocasiones a tiro del empate, pero que la impericia, la impotencia y algunas buenas atajadas de Saja, lo evitaron. Esta derrota no hace más que profundizar las dudas y las limitaciones de la Lepra cuyo futuro inmediato aparece con nubarrones.

Tan cerca y tan lejos a la vez estuvo Newell’s del empate. Es que la gran diferencia entre Racing y la Lepra estuvo en las áreas, donde la Academia sacó provecho de una de las chances que tuvo en base a una genialidad de Teo Gutiérrez, mientras que los rojinegros volvieron a pasear por Avellaneda su exasperante impotencia ofensiva. Así, con una diferencia que se sustentó básicamente en la jerarquía de los jugadores que estaban de un lado y del otro de la cancha, especialmente de tres cuartos de cancha en adelante, se consumó esta derrota leprosa por 1 a 0, que profundiza sus dudas y limitaciones y abre un enorme signo de interrogación para el futuro inmediato.

Es cierto que en el complemento Newell’s revirtió la imagen, porque fue mucho más que Racing, estuvo más firme en defensa, y tuvo mayor presencia en el área rival, basado fundamentalmente en la presencia inquietante del paraguayo Aquino, que pese a tener las mejores chances, no logra dar el salto de calidad que el equipo necesita. Pero esa mejoría no le alcanzó para cambiar el resultado, que, luego de que Teo Gutiérrez metiera un chanfle tremendo a los 9 minutos de partido, significó la exígua diferencia que hubo al final entre un equipo y otro.

Es que pese a tener claras chances para igualar, la producción ofensiva del equipo dirigido por Torrente sigue siendo el Talón de Aquiles de este equipo que no logra plasmar en el resultado los buenos momentos que tiene el equipo en algunos pasajes del partido. Como le sucedió esta noche, cuando en el complemento tuvo situaciones claras para igualar, especialmente en los pies de Aquino y del Gordo Sperduti, pero que no encontró correlato en el arco rival.

Esa fue la gran diferencia entre uno y otro, porque en el primer tiempo cuando fue todo de Racing, Gutiérrez decoró con un golazo ese mejor andar de la Academia, que inclusive tuvo chances para aumentar, ante un Newell’s que por entonces hacía lo que podía, puesto que no lograba tenerla ni contener en la zona del mediocampo, los delanteros no aguantaban la pelota ni generaban nada productivo en ofensiva, y la defensa, uno de los puntos más altos del equipo en estos partidos, no lograba hacer pie ante la jerarquía y desequilibrio de los atacantes de la Academia. (La Capital)