Cristina Fernández respondió a las declaraciones de la presidenta del FMI

“Mi país es una Nación soberana que toma sus decisiones y no va a ser sometida a ninguna presión o amenaza”, dijo la Presidenta argentina en su discurso, en referencia directa a Christine Lagarde. También volvió a insistir al pedir que “Gran Bretaña se siente a dialogar” y que “cumpla con las resoluciones sobre la soberanía de las Islas Malvinas”.

La presidenta Cristina Fernández respondió hoy la crítica en forma de metáfora futbolística que realizó la titular del FMI Christine Lagarde contra Argentina, le recordó que «esto no es un partido de fútbol» y advirtió que «el rol del presidente de la FIFA ha sido más satisfactorio que el rol de los directores del FMI».

Esta frase junto a la que se transcriben a continuación fueron las más destacadas del discurso que formuló la mandataria ante la Asamblea anual de la ONU:

«Es necesario tener una clara percepción de cuáles son los problemas y las situaciones que se están originando en el mundo para entender la necesidad de tener políticas diferentes, orientadas a construir una paz verdadera y duradera. Debe implicar elegir antes que el lenguaje de las armas, el de la diplomacia».

«Es necesario un replanteo de lo que significa una guerra comercial a partir de políticas que unos denuncian como proteccionistas pero que son en defensa de nuestras sociedades frente a las economías de los países desarrollados, que han sido causantes de la crisis que estamos viviendo».

«Mi temor más grande como militante, frente a la falta de resolución de la crisis económica internacional, es que millones de occidentales dejen de creer que un sistema democrático puede darle las soluciones».

«No seremos economistas, pero tampoco somos tontos. Cada uno de estos movimientos implican formidables transferencias de fondos y los perjudicados son millones y millones que pierden sus trabajos».

«No venimos a dar lecciones a nadie, no somos maestros de nadie. Simplemente queremos contar la experiencia de un país que vivió una situación similar a la que viven otros países del mundo desarrollado, queremos aportar desde lo empírico, no desde lo teórico».

«Argentina ha reestructurado el 94 por ciento de su deuda soberana y viene pagando rigurosamente sus vencimientos desde 2005 y lo vamos a seguir haciendo».

«Quiero decirle a la titular del FMI (Christine Lagarde) que esto no es un partido de fútbol, esto es la crisis económica y política más grave de la que se tenga memoria desde la década de los años ’30. Mi país no es un cuadro de fútbol, es una Nación soberana que toma sus decisiones y no va a ser sometida a ninguna presión o amenaza de que sino hace tal cosa se le va a poner una tarjeta roja».

«El rol del presidente de la FIFA ha sido más satisfactorio que el rol de los directores del Fondo Monetario Internacional en cuanto a organizar lo que es su responsabilidad. La FIFA organiza cada cuatro años un mundial, el próximo es en Brasil, el FMI vive tratando de organizar la economía desde los ’80 y crisis tras crisis no logra hacerlo».

«Querer solucionar los problemas del mundo con las recetas que los provocaron, resulta absurdo».

«Pedimos a Gran Bretaña que se siente a dialogar, no estamos pidiendo que nos digan que tenemos razón, queremos que se sienten a cumplir con las resoluciones y dialogar sobre la soberanía de las Islas Malvinas».

«Queremos que se sienten a cumplir con la resolución de la ONU, dialogar sobre la soberanía de las Islas Malvinas y desmilitarizar el Atlántico Sur, una región de paz sin diferencias étnicas ni religiosas que nos lleven a enfrentamientos».

«He decidido instruir a nuestro canciller (Héctor Timerman) para que tenga lugar aquí en ONU una reunión bilateral entre ambas cancillerías (Argentina e Irán). Esperamos resultados de esa gestión en cuanto a propuestas de cómo encaminar un conflicto tan profundo que data de 1994».

«No se puede tener un doble estándar entre aquellos miembros que se sientan en el Consejo de Seguridad de manera permanente y tienen derecho a violar las resoluciones y el resto de nosotros, simples mortales, que debemos hacer saludo y venia ante cualquier resolución de Naciones Unidas».(El Litoral)