Ariel Bulsicco: “La gestión Fein es la peor desde el regreso a la democracia”

Ariel Bulsicco, periodista de Telefé Noticias, dijo que no ve bien a la ciudad y que la actual intendenta no es fiel representante de los rosarinos

Por: Paula Socolsky @pau_soco

El conductor del noticiero de Canal 5, Ariel Bulsicco, recibió a Política Plus para hablar del papel que cumplen los periodistas en la sociedad y la importancia de debatir profundamente sobre la aplicación de la Ley de Medios.

Además, afirmó que se siente identificado con el modelo nacional y que le preocupa que no haya ningún reemplazo para seguir con el proyecto. Por otra parte, marcó sus diferencias con el gobierno local y dijo que “no se ocupa de los problemas barriales y las necesidades de la gente”.

– Trabajaste un tiempo en radio y hace 19 años que estás al frente del noticiero de Telefé. ¿Cuál te parece que debe ser el rol fundamental del periodista?

– En general, el compromiso. Y no perder  nunca el motivo por el cual uno elige el periodismo, que es fundamentalmente ser la voz de los que no tienen voz.  Estar en un medio siempre es un privilegio, ya sea masivo o no. Lo entiendo como una concesión que nos da la gente. Tenemos  un tiempo para ejercer el periodismo, porque después vienen otros. Y a partir de ese principio hay  que encargarse de ser la voz de esa gente, de tratar de representarlos, comprometiéndose con las personas a quienes se entrevista y con las noticias que uno da.

– En más de una ocasión utilizás las redes sociales como medio de denuncia.  Lo hiciste con las censuras recibidas en el caso Tognioli, o para hablar de los intereses económicos y la concentración monopólica de lo medios.  ¿Crées que todavía es necesario un debate profundo sobre la aplicación de la Ley de Medios, para que exista una verdadera libertad de expresión?

– Sí. Estamos poniendo mucho énfasis en lo que pasa en Buenos Aires con la Ley de Medios, que me parece un debate interesante y en buena hora que se da, sobre todo con aquellos que no quieren respetar la ley. Pero descuidamos un poco lo que pasa en Rosario. Se está dando un cambio muy importante en los medios y hay beneficios, pero además aparecen partes oscuras o negativas.  Lo que estoy observando es que los espacios que se abren en los medios para hacer programas locales, como exige la nueva ley, son ocupados por grupos que tienen el “beneficio” de tener una amplia billetera. Y los espacios que se abren para laburantes, y no sólo de periodistas sino también de actores, locutores, escenógrafos y todas las personas que implican hacer un programa, se achican a estos grupos. La prioridad en los medios de Rosario pasa por que pagues el espacio, sin importar lo que vayas a hacer después.

Eso hay que debatirlo y lo quiero denunciar porque sino, no puedo sentirme tranquilo. No lo hago contra nadie, pero me provoca mucha molestia e inquietud. Por nosotros, que ya estamos en el medio, pero sobre todo por los que vienen después. Hemos dicho que la Ley de Medios es muy importante para abrir espacios, porque sino caemos en las cadenas y repetimos todo lo que hay en Buenos Aires. Ahora que se abrieron los espacios, ¿quiénes los ocupan? La práctica nos dice que lo están ocupando estos grupos que tienen plata, sin importar su preparación. Y a veces no está claro de donde viene la plata y hay que denunciarlo. O lo sabemos pero… está muy turbio.  Eso provoca más molestia, y sobre todo en los medios, hay responsabilidades que cumplir. De parte nuestra a veces también hay complicidad, porque todos sabemos lo que pasa y nos callamos. No es contra nadie, hay que difundirlo porque es un debate que debe darse como laburantes.

– Tuviste más de una oportunidad para irte a trabajar a Buenos Aires. ¿Qué te ofrece Rosario que siempre decidiste quedarte?

Sobre todo me ofrece tranquilidad, y sé que en Buenos Aires no la voy a tener. Me gusta el periodismo, aunque el ambiente dentro de los medios sea complicado, pero es sólo una parte de mi vida. Si me voy, eso que es una parte se va a transformar en algo fundamental. Priorizo mi tranquilidad como ciudadano. Mi vida, mi salud, porque como otros trabajos, es desgastante. En Buenos Aires hay mucha presión, mucha competencia,  hay que dedicarle mucho tiempo y son muchas las trabas. Soy una persona que incorpora mucho lo que le toca vivir cada día y no estoy dispuesto a pagar ese precio a costa de mi salud, se que podría causarme problemas. Rosario es una ciudad donde uno está más tranquilo y se puede vivir más allá de ser conocido.

– ¿Y política y socialmente hablando, cómo ves la ciudad?

– No la veo del todo bien. La gestión de Mónica Fein es la peor desde que volvimos a la democracia. Hemos tenido intendentes de variados signos políticos y en general han sido buenas intendencias. Esta me parece que es la más flojita, sobre todo a la hora de ocuparse de los problemas barriales y las necesidades de la gente. Y así como anteriormente decía que el periodista tiene que ser la voz de la gente que no puede estar en un micrófono, me parece que la intendenta es la representante de todos los rosarinos, y no es buena para reclamar en otros estamentos. Ya sea por su mismo signo político con el gobierno de la provincia, o porque no se querrá enfrentar con el gobierno central, pero no es fiel representante. En estas épocas hay un gran vacío que se profundiza con el tema de los barrios, donde hay mucha ausencia del Estado.

– ¿Con qué dirigente político te ves mejor representado?

– Estoy muy a favor con las políticas del gobierno nacional. Me parece que es una política diferente a lo que se vivió en democracia. Que se enfrenta a las corporaciones como nunca lo hubiese soñado, y de políticas muy concretas. Se sabe lo que quiere este gobierno y me siento identificado. A mí me educaron diciéndome que el peronismo era lo peor, y de chico tomé ese mensaje que me transmitieron y fui  siguiendo al anti-peronismo. Afortunadamente, en base a los hechos, pude decidir que me siento muy identificado con este gobierno kirchnerista, en cuanto a derechos individuales, a políticas sociales y a priorizar el mercado latinoamericano. Hay algunas cositas que no me gustan, pero valoro eso.

– ¿Qué te parece que se podría mejorar del modelo kirchnerista?

– El aspecto vinculado a las denuncias que se hacen sobre enriquecimientos o ciertos negocios que no están muy claros. Me parece que el gobierno debería poner más énfasis en ese tema. También hay entornos que no me convencen del todo. Tenemos una figura principal que marca una línea de trabajo, pero al rededor hay mucho vacío. Después, las corporaciones se enfrentan como hay que enfrentarse. Hablan de la “Cris Pasión”, pero es una palabra hecha, sobre todo desde los medios y la oposición. Un mensaje que se cae rápidamente, no tiene argumentos. Hay una oposición que no sabe para donde disparar, que está desconcertada.

– ¿Por qué crees que Cristina no ha logrado consolidar un sucesor?

– Es un poco lo que pasa también con Chávez. Son personalidades únicas, y cuesta encontrar un remplazo. Hay mucho centralismo también a la hora de construir políticas. Tanto Néstor como Cristina, fueron un matrimonio que siempre han determinado las medidas en un grupo muy limitado de gente, 3 o a 4 personas. Y es una forma de hacer política. Cuando hay un anuncio importante no te enterás hasta que no se hace públicamente, cuando antes siempre existía la versión previa. Centralizar tanto ese poder o ese proceso, deriva en que abajo no se perfile una figura que pueda reemplazar. No es fácil, porque son personas con características especiales, que nacen y aman la política, y donde los proyectos giran en torno a ellos. Es muy difícil y me preocupa que no haya ningún reemplazo para seguir con un proyecto claro como este.

¿Y quién pensás que podría hacerle frente al gobierno en las próximas elecciones?

– No encuentro nadie.  Se habla de Macri, se habla de Binner, pero están muy lejos de poder estar a la altura de competir con Cristina. Teóricamente ella no podría seguir, habría que ver cuál es el candidato del oficialismo, donde tampoco encuentro un candidato claro. Pero enfrente, dejan mucho que desear. Además de no coincidir con las políticas que proponen, son muy contradictorios y no es gente que uno vea como políticos de gestión, de trabajo y de proyectos. Viven improvisando, maquillados y dependiendo de lo que dicen algunos medios. Gente maquillada no me convence para nada, a mí me gustan los políticos que dicen claramente lo que quieren hacer y lo cumplen.

(Paula Socolsk/Política Plus)