Newell’s busca recuperarse ante Temperley

La Lepra apuesta a levantar el ánimo y el juego para dejar atrás dos derrotas consecutivas. El parate por las elecciones nacionales le vino bárbaro a Lucas Bernardi y al grupo de jugadores para machacar conceptos, revisar errores, corregir falencias y levantar la autoestima.

En Newell’s es tiempo de recuperación. De dejar atrás las últimas dos derrotas y levantar la puntería. El parate por las elecciones nacionales le vino bárbaro a Lucas Bernardi y al grupo de jugadores para machacar conceptos, revisar errores, corregir falencias y por sobre todas las cosas levantar el ánimo y la autoestima, dos factores que quedaron demasiado bajos y que deben encontrar respuestas positivas cuanto antes para apuntalar la reacción futbolística. Incluso el propio DT reconoció la necesidad de conseguir una victoria revitalizadora, energizante para este proceso y que se constituya en el punto de partida para el crecimiento del equipo. Hoy, a las 19.20, Newell’s tiene una cita con la reivindicación ante el humilde, pero aplicado y astuto Temperley. Siempre el fútbol da revancha y esta noche los rojinegros necesitan rebelarse ante la adversidad con ganas, empuje, pero por sobre todas las cosas jugando al fútbol con inteligencia, que es el camino más directo para acercarse a un resultado positivo.

   El DT rojinegro continúa adelante con su determinación de armar fecha a fecha el equipo que considera más competitivo posible, dejando de la lado la importancia que pueden tener algunos apellidos. Ayer no hubo confirmaciones de parte del cuerpo técnico y habrá que aguardar hasta hoy para conocer a los once. No se descartan sorpresas, incluso hasta podría atajar el pibe Ezequiel Unsain.

   Claro que más allá de los nombres y el esquema táctico, que volverá a ser un 4-3-3, la realidad estará signada por la capacidad de los jugadores de tener una puesta en escena más confiable en todo sentido. Porque en lo que tiene que ver con los cuatro partidos del ciclo Bernardi, el primero ante Racing fue brillante, pero luego comenzó una caída paulatina que tuvo escalones descendentes ante Tigre, Central y Olimpo. Allí no faltaron los desacoples defensivos, pero tal vez lo más llamativo fue la merma en la intensidad para presionar al rival y el escaso vuelo futbolístico en los últimos metros. A Newell’s le costó muchísimo generar opciones de gol y hace tres juegos que no marca goles.

   Temperley es un equipo que no saldrá a regalarse, que buscará achicar espacios en el medio, pero tampoco se resignará a mirar el arco de enfrente y cuenta con jugadores veloces y pícaros de tres cuarto en adelante. Por eso, más allá de las urgencias, Newell’s deberá tener determinación, pero sin desesperarse.

   “Automáticamente con un resultado positivo se mejora en todo sentido”, reconoció el DT. Así resumió el escenario mejor que nadie.

(La Capital)