España levantó restricciones a la compra de biodiésel argentino

Cristina dijo que fue a consecuencia de las gestiones que hizo el  gobierno argentino. Las trabas fueron la represalia española a la  decisión del gobierno de expropiar YPF.

La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, destacó anoche que la revisión de la norma española que impedía el ingreso de biodiésel argentino fue consecuencia de la gestión de su gobierno ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).

“La revisión de la norma para permitir el ingreso del biodiésel argentino fue gestión del gobierno ante la OMC porque los españoles sabían que perdían el juicio, y por eso tuvieron que levantar la prohibición, eso es representar los intereses de los argentinos”, señaló la jefa de Estado durante un encuentro con intendentes.

Fernández de Kirchner reaccionó así a la decisión del gobierno del presidente Mariano Rajoy de dejar sin efecto la aplicación de la norma sancionada en abril que frenaba el ingreso de biocombustible argentino. La medida fue adoptada en represalia a la decisión del gobierno argentino de expropiar el 51 por ciento de las acciones de la petrolera YPF que estaban en poder del grupo Repsol.

Argentina presentó el 17 de agosto pasado un cuestionamiento formal ante la OMC por la resolución de España contra el biodiésel argentino.

Según expresó este martes la Cancillería argentina, la medida española “evidenciaba, una vez más, las prácticas proteccionistas europeas al asignar cuotas de producción a los productores de biodiésel únicamente localizados en la Unión Europea”.

La norma disponía una “prohibición de hecho a la importación de biodiesel extracomunitario, dejando fuera del mercado al producto de origen argentino, líder mundial por eficiencia y costos”.

En 2011, Argentina vendió casi 720.000 toneladas de biocombustible a España, su principal comprador.

La Cancillería argentina sostuvo que la decisión del Reino de España de derogar la medida que impedía el acceso de biodiésel nacional a ese mercado, convalida la denuncia realizada por Argentina a causa de esta situación ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), por considerarla “discriminatoria y en flagrante violación de los compromisos contraídos”.

Ayer, en un comunicado la Cancillería destacó que la orden adoptada por el gobierno español en abril “evidenciaba, una vez más, las prácticas proteccionistas europeas al asignar cuotas de producción a los productores de biodiésel únicamente localizados en la Unión Europea”.

En la práctica, la norma disponía una “prohibición de hecho a la importación de biodiesel extracomunitario, dejando fuera del mercado al producto de origen argentino, líder mundial por eficiencia y costos”.

La Cancillería resaltó que al pedido argentino “se sumó la reciente advertencia de la Comisión Europea sobre la necesidad de que España se ajuste a la normativa de la OMC, avalando la posición de nuestro país”.

El Gobierno a través del Ministerio de Relaciones Exteriores afirmó que “Argentina persistirá en su reclamo hasta tanto la norma española sea derogada en su totalidad y se garantice el acceso del biodiésel argentino al mercado europeo en las mismas condiciones de trato que a los productores del resto del mundo”.
(El Litoral)