Exigen cambios en ley de emergencia agropecuaria para activar fondos

La diputada nacional Ana Copes recalcó la necesidad de revisar la Ley de Emergencia Agropecuaria del año 2009, con el fin de proveer asistencia urgente al sector santafesino, ya que la misma permite únicamente al Banco Nación el otorgamiento de créditos (y no a otros), y también fue vetado el fondo específico destinado a emergencia.

En el marco de una reunión por la emergencia agropecuaria en la localidad en la Sociedad Rural de Rafaela, la diputada planteó la necesidad de modificar el inciso relacionado con el protagonismo del Banco Central en el otorgamiento de créditos. “¿Qué pasa si el productor no es cliente del Banco Nación?, hay que revisar esos incisos, ningún banco privado va a hacer caridad”, manifestó la legisladora.

A esto se agrega que el veto al fondo específico destinado a este tipo de emergencia que esta ley permitía. Copes exigió modificar la ley respecto a la acumulación del fondo para la emergencia. «Los productores reclaman con legítimo derecho la intervención del Estado. Este sector ha contribuido muchísimo con el Estado y hoy atraviesa momentos muy graves”, dijo.

“En las épocas buenas se ahorra para las épocas malas y eso no ha sucedido. Debemos comprometernos a que esa Ley se cambie, es el momento de producir una Ley para el futuro, para también agilizar todos los mecanismos para que las herramientas nacionales se puedan poner a disposición de Santa Fe”, continuó la Legisladora del Partido Demócrata Progresista.

“La Ley nacional de Emergencia Agropecuaria Ley N° 26.509 del año 2009 es una típica Ley de aquellos que no han visto en el campo el motor de la economía argentina, está vetada en el corazón”, concluyó Copes.

La diputada también recalcó que “se necesitarán subsidios directos para lechería, arroz, caña de azúcar, horticultura en los cordones verdes de Rosario, Santa Fe y también de la costa; para el sector turístico de Santa Fe al norte costero, y para pequeños productores ganaderos, ya que esta crisis tuvo un fuerte impacto en la economía y en la cotidianeidad de las comunidades.