Tres presos se escaparon de una comisaría tras cortar dos candados

Fue a la madrugada, en la 15ª, en la zona sur. Había 20 detenidos y sólo tres policías en la dependencia. Habrían tenido ayuda interna o externa.

A las 2.30 de la madrugada de ayer los tres policías que estaban de guardia en la comisaría 15ª escucharon ruidos en la zona del penal inaugurado en marzo último. Linterna en mano corrieron hacia allí y descubrieron que una puerta de la comisaría, que da sobre calle Ameghino entre Sarmiento y Mitre, estaba abierta. En el piso habían quedado dos candados cortados y a un costado dos alicates para cortar hierros. Entonces los policías cerraron la puerta y contaron a los presos. Debía haber 20, pero sólo quedaban 17. Los tres evadidos estaban bajo prisión preventiva y a disposición de la Fiscalía de Flagrancia. Dos por robo y uno por portación ilegítima de arma de fuego. Fue la segunda fuga en la misma seccional en 20 meses (ver aparte), ambas investigadas por el fiscal Patricio Serjal.
«Por el momento no podemos descartar ninguna hipótesis. Esto pudo llevarse a cabo con colaboración interna (policial) o externa, ya que la nueva disposición del penal permite que desde afuera de la seccional se pueda llegar a inmediaciones del penal», explicó ayer en rueda de prensa el fiscal, sorprendiendo a propios y extraños por la precaria seguridad que presenta el lugar.
En la primera de las fugas de la 15ª, en noviembre de 2014, los internos se fueron por la puerta del frente del viejo penal. La madrugada de ayer lo hicieron por una puerta de emergencias, pensada para evacuaciones y ubicada en el patio trasero del «módulo de detención transitoria», como se denomina al penal.
También hubo en esa rueda de prensa preguntas que quedaron sin respuestas, ya que la pesquisa está en sus primeros pasos. ¿Los tres internos estaban separados del resto de la población? ¿Cuánto tiempo debe permanecer un interno en un modulo de detención provisoria? Seguramente una vez más esta fuga pondrá sobre el tapete el debate crónico sobre el hacinamiento de los presos en las comisarías de Rosario.
Mientras tanto, el fiscal ordenó el secuestro de los candados, las pinzas, el libro de guardia de la seccional y en las próximas horas se le tomará declaración a los 17 internos que no se fugaron para ver si aportan algún dato que permita conocer pormenores del hecho en cuestión.
Los evadidos fueron identificados como Nahuel San Juan, de 21 años, detenido desde el 3 de mayo pasado en una causa por robo calificado y privación ilegal de la libertad; Juan Antonio Cáceres, de 31, detenido desde el 30 del mismo mes por portación de arma; y Juan Carlos Gutiérrez, de 40 años, acusado de robo. Este último sería integrante de la gavilla de «Los gorditos», un grupo que tiene su área de influencia en los barrios Fuerte Apache y Tiro Suizo, escenario que está en reconfiguración de territorio últimamente. Es que Los gorditos se dedican al narcomenudeo de manera autónoma y en los últimos meses han ganado peso con la desaparición de sus competidores, «Los pechochos», y la decadencia de otro grupo denominado «Los nietos de Doris».
Un nuevo lugar. El sábado 12 de marzo último fue inaugurado el nuevo penal de la seccional 15ª. Según detalles de la crónica oficial de ese acto, «se llevó a cabo la demolición total del viejo penal y de sus espacios integrados, lo cual además de generar el espacio necesario para el emplazamiento del nuevo modulo transitorio de detención, permitió la creación de un espacio verde que mejoró la calidad ambiental del entorno. El módulo que se emplazó tiene capacidad para 16 detenidos», se dijo.
El lunes a la noche, la guardia de la comisaría 15ª realizó el último conteo antes de detectar la fuga y había 20 hombres privados de la libertad bajo la custodia de tres empleados: un sumariante que atendía en la guardia, un cabo de cuarto encargado del penal y un agente. Además del sub jefe de la seccional que, debido a la licencia del titular, estaba a cargo de la 15ª durante las 24 horas pero que en ese instante no se encontraba en el lugar.
Corridas y saltos. La fuga comenzó a tomar forma cuando a las 2.30 de la madrugada el sonido de personas corriendo en el área del penal encendió todas las alarmas. Cuando los policías llegaron ya era tarde. El fiscal Serjal informó que la puerta que fue violentada por los evadidos es contigua al tapial de un vecino y que seguramente tras abrir la puerta los internos ganaron la calle rápidamente. Si bien el fiscal optó por la cautela, no negó que sus hipótesis de trabajo son que los internos se evadieron con ayuda interna, algo que complicaría severamente a los policías de guardia; o quizás con ayuda exterior. «Estamos investigando el protocolo que deben cumplir los efectivos policiales y viendo si debemos realizar alguna imputación sobre ellos. Por eso dije que no descarto ninguna hipótesis sobre personal policial o por ayuda externa», indicó el fiscal. «En la parte trasera del penal no hay cámaras de videovigilancia», indicó Serjal.

En 2014 fueron 32
El domingo 23 de noviembre de 2014, 32 internos se fugaron de la seccional 15ª tomando como escudo a uno de los tres policías que, como ayer, estaban de guardia. La fuga se dio en el antiguo penal de la seccional, demolido para la construcción del lugar de detención ahora burlado. Además, el 7 de abril último, en la seccional 24ª de Granadero Baigorria se produjo la primera fuga de 2016, cuando se escaparon seis internos. (La Capital)