Quiénes integrarían el gabinete de un próximo gobierno de Cambiemos

Desde la Casa Rosada festejan mediciones que aseguran que la fórmula de Macri-Pichetto acorta diferencias con la de Fernández-Fernández.

El próximo domingo, en lo que se dio en llamar la gran encuesta nacional de las PASO, se definirá hasta qué punto la sociedad se encuentra dividida entre dos modelos políticos. Fuentes de la Casa Rosada creen que la polarización ya alcanza al 80% del electorado, es decir el porcentaje que ya tendría decidido su voto por el oficialismo o por la fórmula Fernández – Fernández. No quieren difundirlo, pero las últimas mediciones que circularon en medios de la Presidencia arrojan que la fórmula de Juntos por el Cambio ha acortado las diferencias con la oposición del Frente de Todos.

Dicen contar con sondeos que muestran un “voto vergonzante”, es decir gente que finalmente terminará votando a Mauricio Macri, pero que no se anima a decirlo. En este contexto se explica el tweet del primer mandatario invitando a la gente a difundir por redes sociales su voto. Curiosamente, en las filas de Alberto Fernández se tiene la misma impresión, pero en sentido contrario ya que este caso creen que los que tienen “vergüenza” de manifestarse son los “desencantados” con Cambiemos y que ahora –dicen- van a votar al Frente de Todos.

Más allá de esta especulación, en la Casa Rosada crece la expectativa de un triunfo en primera vuelta. A la luz de estos pronósticos -que habrá que ver si se concretan- en el Gobierno ya está pensando en “el día después”, es decir el 28 de octubre, si se cumplieran los augurios oficiales.

En las diferentes reuniones que los políticos del oficialismo tienen con representantes de las dirigencias empresarias, sindicales o de la sociedad en general, suelen recibir críticas que se concentran tanto en las dificultades económicas como en un modelo de gestión política que se considera “cerrado”, es decir con limitada participación de otras corrientes políticas. Dicho de otra forma, los dardos se dirigen al jefe de Gabinete, Marcos Peña, artífice principal de la arquitectura política del Gobierno, y al ministro de Hacienda y Finanzas, Nicolás Dujovne.

En estas conversaciones privadas, los representantes del oficialismo rechazan estas críticas. Sostienen que siempre negociaron con la oposición y que acaban de dar una muestra contundente de apertura con la incorporación del senador peronista Miguel Ángel Pichetto acompañando en la fórmula a Macri.

Ponderan la gestión de Peña “gracias a su estrategia hoy somos gobierno y es posible que continuemos”, aseveran. Respecto de las críticas a Dujovne, los argumentos de defensa se basan en el buen cumplimiento de las metas fiscales o, como argumenta el propio ministro, según comentan en la Rosada, en sus fluidos contactos con los organismos multilaterales de crédito.

Pero más allá de estas defensas, en el oficialismo circulan versiones a eventuales cambios en el gabinete nacional si Macri lograra la reelección.

Hay quienes añoran lo que consideraban una “fórmula ganadora” como la que constituyeron la dupla Macri–Horacio Rodríguez Larreta en la administración de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Desde este punto de vista, es que muy en voz baja se habla de que Rodríguez Larreta podría ser el futuro jefe de Gabinete de un segundo mandato de Macri, en aras de abrir un diálogo más intenso con las otras fuerzas políticas. Comentan que esta posibilidad incluso habría sido contemplada cuando se armó la fórmula con Diego Santilli como candidato a reelegir como vicejefe en la Ciudad, con la alternativa de quedar al frente del mando ante un eventual pase de Larreta al Poder Ejecutivo Nacional.

En este contexto, y siempre en el campo de las especulaciones, creen que Marcos Peña sería recompensado con su pase a la Cancillería, un frente, el de las relaciones internacionales, que es uno de los capitales más valiosos de la gestión Macri, según entienden en Cambiemos.

En cuanto al caso de Dujovne, si bien también lo defienden en el Gobierno, hay quienes creen que será necesario “oxigenar” la gestión económica, generando nuevas expectativas tras el “plan picapiedras” para llegar a las elecciones según calificó a la actual política, el economista y amigo del presidente Carlos Melconian.

En tren de aventurar destinos para Dujovne, en medios oficiales se comenta que existe un acuerdo para que un argentino sea el próximo presidente del Banco Interamericano de Desarrollo. Bajo este paraguas se especuló en más de una oportunidad con que el actual ministro del Interior, Rogelio Frigerio, podría ser designado para ocupar esa silla.

Sin embargo, algunos afirman haber escuchado que bien podría ser el destino de Dujovne, dada su estrecha relación con las finanzas internacionales y particularmente con la administración del presidente estadounidense Donald Trump.

En tanto, otro de los funcionarios que en las charlas con distintos referentes es valorado es el Ministro de Producción Dante Sica como asimismo Guillermo Dietrich, titular de la cartera de Transporte a quienes se cree que continuarán en el gabinete nacional.

Aunque también y con la intención de escuchar otras voces, en el entorno presidencial confiesan que el actual gobernador de Salta Juan Manuel Urtubey sería una incorporación importante. Quienes conocen al candidato a vicepresidente en la fórmula que encabeza Roberto Lavagna, no descartan que esto pueda llegar a ocurrir. “Es conocida y legítima la aspiración presidencial de Urtubey” de donde y al igual que con Rodríguez Larreta, una gestión en el gobierno nacional sería útil para una carrera presidencial

Estos nombres son los primeros que surgen no tanto porque Macri tenga ya in pectore todo su futuro gabinete, sino más bien por las demandas que van recogiendo en las charlas de campaña. (Ámbito)