Deserción: Tres diputados se fueron del PRO y armaron un bloque con partidos provinciales

Son Antonio Carambia, Pablo Ansaloni y Beatriz Ávila. Se juntan con misioneros, un rionegrino y el mendocino Ramón. Tendrán 8 votos y podrían ayudar a Massa con el quórum. Camaño confirma un bloque de 10, que será decisivo.

Tres diputados renunciaron al bloque PRO este martes para sumarse a un interbloque con 5 referentes de partidos provinciales y podría significar una contribución clave para el Frente de Todos, que por ahora no consigue quórum propio. 

Como adelantó LPO, sólo la ruptura del bloque conducido por Cristian Ritondo y la creación de bloques afines a Alberto Fernández podría garantizar una mayoría propia del Frente de Todos, que este lunes debió negociar con Juntos por el Cambio cómo y cuándo tratar el presupuesto. 

El jefe del Pro Cristian Ritondo perdió al santacruceño Antonio Carambia, al bonaerense Pablo Ansaloni y a la tucumana Beatriz Ávila, que había evaluado armar un monobloque pero prefirió alejarse de Juntos por el Cambio.

Los tres del PRO que se fueron ya venían dando señales. Carambia tiene un partido en Santa Cruz y hace una semana le avisó a Ritondo que no lo acompañaría; mientras que Ansaloni es parte de un regreso a la CGT de UATRE, el gremio de los trabajadores rurales. «Yo voy a hacer lo que digan mis trabajadores», le explicó Macri, por teléfono, el secretario general Ramón Ayala.

Con Ávila hubo un último intento de Ritondo para habilitar un monobloque como el que tendrán el sanjuanino Marcelo Orrego y el también tucumano Domingo Amaya. No lo consiguió. 

Carambia y Ansaloni se sumarán al bloque «Unidad y equidad federal», presidido por el mendocino José Luis Ramón, que llegó en 2017 con un frente local y luego apoyó la candidatura presidencial de Roberto Lavagna.

Ramón presidirá el interbloque  «Unidad Federal para el desarrollo» junto a Ávila, el rionegrino Luis Di Giácomo y los misioneros Flavia Morales, Diego Sartori y Ricardo Wellbach, referentes de los partidos locales que gobiernan sus provincias.  

«A pesar de las malas intenciones, hemos construído un espacio amplio, del federalismo unido, con muchos colores políticos demostrando que podemos superar ‘la grieta», posteó Ramón, en alusión a la presión que los ex macristas sufrieron por las redes sociales. 

Los 8 federales de Diputados pueden ser de mucha utilidad para el Gobierno que esta tarde contabilizaba un bloque de 121 votos, con la incorporación de los tres puntanos y la neuquina Alma Sapag. Quedarían a 8 del quórum, justo los votos que controlará Ramón, quien cerró este interbloque con una cena el pasado miércoles. 

Ritondo temía una fractura mayor si partían los diputados cercanos a Emilio Monzó que cuestionaron su elección como jefe, amenazaron con romper, pero prefirieron mantenerse en el PRO y como un sub grupo dispuesto a marcarle la cancha. 

Sumarían 17 y este mediodía se reunieron en el despacho de Nicolás Massot para definir qué postura llevar a la reunión de bloque de unas horas más tarde. El otro bloque para pescar votos sueltos es el flamante interbloque Federal, integrado por los 6 identificados con Roberto Lavagna (justicialistas y un socialista) y cuatro de Córdoba Federal, los leales a Juan Schiaretti. Lo presidirá el ex candidato a gobernador Eduardo «Bali» Bucca y su referente en el recinto será Graciela Camaño. 

Las complicaciones para alcanzar una mayoría propia demoraron la definición de una agenda parlamentaria y por ahora sólo está confirmado que el 18 se abrirá el recinto para tratar el presupuesto.  El resto del temario debe debatirse con los nuevos aliados. Que están apareciendo.


Los misioneros habían presentado la constitución de su bloque propio unas horas antes, presidido por Wellbach, un cambio respecto al Senado, donde se sumaron a Todos por gestión de Cristina Kirchner  Maurice Closs se sumó y le garantizó una mayoría propia. Su coterráneo Magdalena Solari por ahora no lo ratificó. (La Política On Line)

Foto de tapa: Pablo Ansaloni (Facebook)