Murió María Kodama, viuda de Jorge Luis Borges y guardiana de su legado literario

La escritora fue secretaria del escritor en sus últimos años de vida, y se convirtió en su esposa poco antes de su fallecimiento.

María Kodama, viuda de Jorge Luis Borges y custodia de todo su legado literario falleció este domingo en su casa de Vicente López a los 86 años, curiosamente la misma edad que tenía el escritor cuando falleció en Ginebra el 14 de junio de 1986.

Kodama conoció a Borges como alumna, aunque su relación se afianzó tras la muerte de la madre del escritor a los 99 años en 1975, primero en lo laboral como su secretaria, y más tarde como su segunda esposa.

Luego de que le detectaran cáncer hepático, Borges se casó con Kodama el 26 de abril de 1986, menos de dos meses antes de morir. De esta manera, Kodama se convirtió en “la viuda literaria más famosa” de Argentina ya que fue nombrada por el escritor como su albacea sin que ella supiera.

María Kodama manejó el legado de Jorge Luis Borges como una verdadera guardiana de ese legado, al punto de haber llegado a la Justicia en varias ocasiones para protegerlo. Con igual pasión se mostró como una verdadera divulgadora de su obra infinita.

Además de ser la albacea de la obra de su exmarido, Kodama fue también traductora, docente y autora, actividades que quedaron eclipsadas por su rol de guardiana «samurai», como se la apodó por sus orígenes japoneses.

La noticia de la muerte de Kodama a raíz de una cruel enfermedad fue tendencia en las redes sociales: el historiador Felipe Pigna la despidió con un «hasta siempre», mientras que instituciones, editoriales y fundaciones se hicieron eco de su partida, como Penguin Random House Grupo Editorial, que lamentó la muerte de una autora con la que «ha trabajado estrechamente en el cuidado y difusión de la obra de Jorge Luis Borges».

Desde la Fundación El Libro lamentaron «profundamente» su fallecimiento, pese a que Kodama impulsó una batalla legal contra el actual presidente de la Fundación El Libro, Alejandro Vaccaro, escritor, biógrafo y coleccionista de Borges. La escritora lo acusó en numerosas oportunidades de querer sacar «ventaja» con el nombre de Borges, y lo llevó a la Justicia cuando lo demandó por delito de injurias a partir de una nota publicada en una revista.

Guardiana del legado de Borges

Entre las numerosas tareas que Kodama asumió como heredera universal de Borges participó en la decisión de cada edición, e incluso frenó ediciones, como la publicación norteamericana de Diálogos Borges Sábato que salió en portugués, italiano hasta en idioma chino pero no tuvo edición inglés.

También mantuvo numerosos litigios y enfrentamientos, desde demandas de plagios hasta calumnias. También asumió la voz pública de los entretelones de Borges, como cuando salió a decir que «Bioy fue un traidor» porque publicó charlas con su amigo.

En una entrevista que le brindó a la agencia Télam en 2021, Kodama contó que ella no esperaba convertirse en albacea de su exmarido. «Si hubiera sabido que Borges me nombraba heredera no hubiera aceptado. Por eso, cuando él murió su abogado me dijo que antes de hablar con la prensa tenía que darme la noticia de que me había nombrado como heredera universal. Yo le dije: ‘¿Cómo no me consultaron?’ Y él me contestó que Borges le dio la orden de decírmelo cuando él estuviese muerto, porque de lo contrario yo no iba a aceptarlo. Borges sabía que iba a ser yo. Mis amigos me decían: ‘Claro, fue un vivo, porque sabía cómo vas a cuidar su obra, sos japonesa y si tenés una responsabilidad la vas a cumplir, aunque te cueste la vida’».

Sin Kodama, la obra de Borges seguirá siendo custodiada al menos por unos 33 años más, cuando en 2056 se cumplan los 70 años de la muerte del autor y sus textos pasen a dominio público.