Le dieron prisión domiciliaria a la madre del líder de Los Monos

La mamá de Ariel Máximo “Guille” Cantero estaba presa desde abril del año pasado, cuando cayó por haber pagado por balaceras ocurridas en escuelas y estaciones de servicio en noviembre de 2021.

Patricia Celestina Contreras, más conocida en La Granada y Las Flores como «La Cele», pasó a gozar de prisión domiciliaria para terminar de purgar su pena a 10 años de cárcel por la célebre causa de narcotráfico «Los Patrones», y afrontar otro juicio por encargar balaceras a escuelas y estaciones de servicio, hecho por el que estaba detenida desde hace un año.

Complicaciones de salud fueron el fundamento por el que la jueza Valeria Pedrana concedió ayer en audiencia en el Centro de Justicia Penal el pedido de esta mujer de 56 años, matriarca en la organización criminal Los Monos, y madre de «Guille» y «Pájaro Cantero.

Contreras había referido problemas de salud que en los últimos meses merecieron breves internaciones, primero en el Hospital Centenario, de Rosario, y luego en el Hospital José María Cullen, de Santa Fe. Su cuadro de diabetes se agravó, según alegó, y por ello había solicitado cumplir su sentencia en su domicilio, el famoso caserón de la calle Melián, en el barrio La Granada, detrás del casino.

Ayer la jueza de primera instancia Valeria Pedrana convalidó el pedido presentado por los abogados Marcelo Martorana y Fernanda Migoya, y le concedió el beneficio reclamado, con la imposición de una tobillera electrónica para garantizar que no salga de la vivienda. La Cele había sido detenida en abril del año pasado por orden de los fiscales Franco Carbone y Valeria Haurigot, y como derivación de una pesquisa sobre balaceras a escuelas como la Santa Isabel de Hungría y la Crisol, y también a estaciones de servicio, todo en un agitado 2021, previo a las elecciones legislativas.

La investigación determinó que Contreras había encargado y pagado a gatilleros para que perpetraran esas acciones de intimidación pública.

El tira tiros al servicio de la Cele, según se comprobó en la investigación, fue Nazareno «Anteojito» Gauna, a las órdenes del convicto Nelson «Pandu» Aguirre, un soldado de Ariel «El Viejo» Cantero, ex pareja de Contreras.