Una UTE de capitales brasileños y porteños desplazó a Cliba del sistema

«Es la profundización de una gestión de residuos pionera en la Argentina». De ese modo, la intendenta Mónica Fein anunció ayer la adjudicación del servicio de recolección de basura para los próximos siete años, tras sucesivas prórrogas del contrato vencido en 2007. La licitación más costosa que tuvo que afrontar el Palacio de los Leones —unos 2 mil millones de pesos— prevé el ingreso al sistema de la Unión Transitoria de Empresas (UTE) conformada por Vega Engenharia Ambienta SA y Caputo SAICyF, para la zona norte de la ciudad (en lugar de Cliba, del grupo Benito Roggio), y la continuidad de Lime, Industrias Metalúrgicas Pescarmona SA (Impsa), en el sur rosarino. La administración socialista apuesta a avanzar con la separación de desechos en origen y el esquema de contenerización pública.

A minutos de haber firmado el decreto correspondiente, y como adelantó La Capital, Fein detalló que los montos de la concesión, con un plazo de 84 meses con opción a doce de prórroga, serán de 1.062.821.356,83 pesos para la UTE integrada por las firmas brasileña y de la Capital Federal y de 956.712.411,93 para Impsa. Ambas adjudicatarias tomarán el servicio en un plazo de hasta 140 días corridos de rubricado el contrato.

«Para la separación en origen pasaremos en seis meses de 140 islas a 750, junto a la finalización en septiembre próximo de la planta modelo de reciclado y compostaje, y avanzaremos en la contenerización hasta llegar a las 13 mil unidades en toda la ciudad», precisó.

El secretario de Servicios Públicos municipal, Pablo Seghezzo, destacó la futura participación de los rosarinos: «Las vecinales fiscalizarán la prestación. Activaremos un 0800, un centro de monitoreo de atención gratuita y un sistema de indicadores de satisfacción y calidad en diferentes zonas».

La secretaria de Hacienda municipal, Verónica Irízar, quien también participó de la conferencia de prensa, explicó que la adjudicación de la licitación de higiene urbana y gestión de residuos en dos zonas fue firmada tras cosechar el visto bueno de una comisión evaluadora y el Tribunal de Cuentas.

Sobre la demora que experimentó el proceso, Fein la atribuyó a «un escenario económico nacional muy cambiante, con pautas salariales en suba, inflación y restricciones a las importaciones».

Tanto la jefa del Palacio de los Leones como sus funcionarios descartaron que el pago de la indemnización a Cliba detone un conflicto (ver aparte), ya que el municipio le adeuda a la concesionaria —como también a Lime— el abono de certificados vencidos por un monto cercano a los 200 millones de pesos, según denunciaron en su momento distintos bloques opositores en el Concejo.

Todo hace presumir que las empresas exigirán ese pago antes de desembolsar el resarcimiento (100 millones de pesos) a los recolectores cuando concluya el contrato de concesión prorrogado.

La nueva adjudicación también permitirá en su etapa inicial renovar 112 unidades rodantes entre las zonas sur y norte y ampliar las áreas de cobertura de carga lateral. Y destinarán un 2 por ciento de la certificación mensual para acciones de capacitación, sensibilización y divulgación de pautas de separación en origen y minimización, entre otras actividades educativas sobre cuidado del ambiente e higiene urbana. (La Capital)