Las drogas, un triste azote que apaga estrellas en Hollywood

En la casa del actor Philip Seymour Hoffman que fue hallado muerto el domingo, se encontraron decenas de jeringas y 50 sobres que contendrían heroína.

Mantener un «affair» con las drogas, con o sin receta, y el alcohol es moneda corriente en Hollywood, un mundo que desprende glamour pero que en su parte más oscura ofrece una galería de carreras truncadas como al parecer fue el caso de Philip Seymour Hoffman. La droga fue probablemente la causante de la muerte repentina del actor Philip Seymour Hoffman, informó ayer The New York Times. La policía encontró en la casa del actor decenas de jeringas y unos 50 sobres que presumiblemente contenían heroína, así como medicamentos que requerían prescripción médica, informó cadena CNN, aunque la policía aún no lo confirmó oficialmente.

Acostumbrado a meterse en la piel de los más diversos personajes, desde el manipulador líder de un secta, un enfermero, un cura o el brillante escritor Truman Capote, Seymour Hoffman no pudo con los propios fantasmas y recayó en las drogas. Su cuerpo sin vida fue hallado el domingo en su departamento en Nueva York con una jeringa cerca del brazo y con restos de heroína en la habitación. Tenía 46 años, un montón de premios, entre ellos el Oscar que ganó por «Capote», y un futuro brillante.

Como también lo era el de Heath Ledger, que a los 28 años murió en enero de 2008 tras aferrarse a los antidepresivos y combinarlos erróneamente. El australiano recibió unas semanas después el Oscar (póstumo) por «Batman, el caballero de la noche» (ganó el Oscar a mejor actor de reparto por su interpretación de el Guasón) aunque la crítica ya se había rendido a él desde que dio vida a un cowboy que lucha contra su homosexualidad en «Secreto en la montaña».

A los 23 años River Phoenix («Mi mundo privado») generaba encendidos elogios cuando aparecía en la gran pantalla. Una sobredosis acabó con el hermano mayor de Joaquin Phoenix.

Aunque la víctima más conocida tal vez sea la gran Marilyn Monroe. Su muerte en 1962 está rodeada de misterio y oficialmente se habla de un posible suicidio, pero sea como sea la actriz de 36 años ingirió una cantidad letal de barbitúricos, la «droga» de la época.

No obstante, son muchos los actores que lucharon y consiguieron sobreponerse a sus adicciones, como es el caso de Robin Williams (62 años). El amable psicólogo de «En busca del destino» estuvo enganchado al alcohol y la cocaína. Tras pasar más de 20 años sobrio, volvió a recaer en 2003 pero finalmente consiguió recuperarse, aunque sigue asistiendo a las reuniones de Alcohólicos Anónimos.

Drew Barrymore, la niña de «ET, el extraterrestre», confesó que ser niña prodigio le convirtió en adicta a las drogas, pero la actriz de 38 años ha conseguido enderezar su vida y mantiene una discreta carrera en Hollywood, donde suele trabajar sobre todo en comedias.

En un segundo plano quedó también la carrera de Wynona Ryder (42 años), cuyo último gran titular lo dio tras ser sorprendida en 2001 robando en unos grandes almacenes. Fue acusada formalmente de robo y posesión de drogas. Aunque ella no ha hablado de su afición a las medicinas con receta, Woody Allen dio una pista cuando comentó que no pudo trabajar con ella en «Melinda y Melinda» porque no conseguía un seguro para ella.

Robert Downey Jr., sin embargo, el protagonista de la película más taquillera de 2013 («Iron Man 3»), supo desprenderse de sus adicciones tras años de ser más noticia por los escándalos y sus flirteos con los estupefacientes que por sus trabajos en Hollywood.

Ni la cocaína ni la heroína hicieron mella en el talento del exitoso superhéroe de 48 años, que llegó a pasar por la cárcel debido a su adicción. Tras confesar que ya era adicto al alcohol a los 8 años, Downey Jr. parece haber resurgido de sus cenizas.

Proyectos inconclusos

Philip Seymour Hoffman debía estrenar el final desdoblado de “Los juegos del hambre”, donde interpretó a Plutarch Heavensbee. “Los juegos del hambre: Mockingjay – Parte 1” se estrenará este año y la segunda parte estaba en rodaje. Tenía aun sin estrenar “God’s Pocket”, en la cual interpretaba a un hombre que encubre la muerte accidental de su hijastro, y “A Most Wanted Man”.

(LA Capital)