Oposición dividida ante el nuevo Código Procesal Penal

Iniciativa del Ejecutivo. «Legitima la impunidad», dijo Lilita Carrió. «Es lo que planteamos el año pasado», consideró Sergio Massa. El gobierno les pidió «coherencia» a los opositores.

La oposición se mostró ayer dividida respecto al proyecto de reforma del Código Procesal Penal que envió el Ejecutivo al Senado, mientras que desde el gobierno reclamaron «coherencia» al antikirchnerismo para «aprobar rápidamente» la norma, que plantea entre otros puntos la expulsión de extranjeros que sean hallados cometiendo delitos.

Mientras la jefa de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, llamó a la oposición a no «legitimar la impunidad» con ese proyecto, el diputado del Frente Renovador Sergio Massa y legisladores del macrismo se manifestaron «de acuerdo» con la iniciativa anunciada anteayer por la presidenta Cristina Fernández.

Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich reclamó «coherencia» a la oposición para «aprobar rápidamente» el proyecto «porque es lo que pedían». Desde el oficialismo acompañaron la iniciativa al menos tres precandidatos presidenciales: los ministros Florencio Randazzo (Interior y Transporte) y Agustín Rossi (Defensa) y el gobernador bonaerense, Daniel Scioli.

Carrió pidió a todo el arco opositor dejar en soledad al gobierno cuando trate en el Congreso el proyecto y justificó ese pedido en que los legisladores no kirchneristas «no» pueden «legitimar la impunidad» que se buscaría con el nuevo texto legal.

Se apunta a «la impunidad y el manejo (de las causas) por (la Procuradora General Alejandra) Gils Carbó. La votó la oposición, pero no tendríamos que haber tenido a esta fiscal», reprochó la aspirante presidencial por el FAU.

El radicalismo pidió al gobierno nacional que busque el «consenso» al momento de debatir la reforma y reclamó que se realice, en paralelo, una modificación de la ley de Ministerio Público Fiscal.

El titular de la UCR, Ernesto Sanz, aseguró que su partido está a favor del cambio del sistema inquisitivo al acusatorio y reconoció que «nos gustaría llegar a un consenso y sacar este Código», aunque puso como condición una ley que modifique el Ministerio Público. «Si no hay un profundo cambio en la ley de los fiscales, el Código Procesal Penal va a servir para la impunidad», subrayó.

Massa, por su parte, se manifestó de «acuerdo en herramientas que permitan expulsar a inmigrantes que cometan delitos y terminar, como lo planteamos el año pasado, con la puerta giratoria y las trampas procesales», aunque puso reparos en la iniciativa de darle más poder a las fiscalías, y dijo que planteará que el «Parlamento controle el funcionamiento» de los fiscales.

Camino correcto. En tanto el diputado por Unión PRO Pablo Tonelli anticipó que su bloque acompañará la iniciativa porque «va en el buen sentido, en el camino correcto».

El legislador del macrismo destacó que la posibilidad «de acortar los tiempos, reducir las incidencias y agilizar los procesos penales» y también admitió coincidencias en relación a la expulsión de extranjeros «siempre y cuando sean para los que están en condición irregular, que ya es una condición para la expulsión».

Desde el oficialismo, Rossi pidió «generosidad» a la oposición y que participe del debate parlamentario y Randazzo aclaró que «cuando la presidenta habla de que la inseguridad tiene mucho de marketing no lo hace con el sentido de creer que no hay problemas vinculados a la inseguridad. Todo lo contrario».

«Es de un grado de hijadeputez (sic) increíble» afirmar que a Cristina Fernández «no le preocupa» la inseguridad, enfatizó Randazzo.

Mientras que Scioli pidió que «los legisladores tengan el debate y el consenso necesario para poner a nuestro país a la vanguardia» y advirtió que «por más de que pongamos más patrulleros, más policías y prevención, nos quedamos a mitad de camino si no tenemos una Justicia más ágil, más eficiente, con castigo ejemplar a los delincuentes».

(La Capital)