Imputarán a Esteban Alvarado como instigador de un homicidio

Los investigadores del crimen del prestamista Lucio Maldonado (foto de tapa) presumen que éste estuvo cautivo en una casa quinta del acusado.

Esteban Lindor Alvarado, detenido hace nueve días en un camping cordobés tras ostentar el rótulo del prófugo más buscado por la policía provincial, será imputado hoy en Rosario por el crimen del prestamista Lucio Maldonado. El rosarino está en libertad condicional por liderar una banda dedicada al robo de autos en el conurbano bonaerense y es investigado por conexiones con el narcotráfico. Será acusado como instigador de ese homicidio porque una casa quinta de su propiedad fue usada para mantener secuestrada a la víctima antes de la ejecución a balazos. La audiencia será a las 14 en el Centro de Justicia Penal.

Alvarado, de 42 años, fue detenido el sábado 2 de febrero en un camping cercano a Embalse Río Tercero. Personal de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) lo arrestó entonces tras un trabajo de seguimiento e investigación que insumió varios meses. Estuvo alojado en la cárcel cordobesa de Bower mientras se desarrolló el trámite de extradición interprovincial, un procedimiento de rutina en el que un juez y una fiscalía cordobeses constataron que Alvarado era requerido desde los tribunales rosarinos.

Con esa formalidad cumplida, el sábado efectivos de la TOE trasladaron a Alvarado hasta la unidad penitenciaria Nº 11 de Piñero. En esa cárcel quedó alojado en un pabellón para presos de alto perfil, a la espera de la audiencia fijada para hoy a las 14 y que se desarrollará bajo especiales resguardos de seguridad.

Los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra prevén imputar a Alvarado como instigador de un homicidio calificado por la participación premeditada de dos o más personas, un delito que contempla prisión perpetua. El acusado será defendido por el abogado particular Claudio Tavella.

Si bien no trascendieron detalles del planteo acusatorio, se prevé que la audiencia sea extensa y que en ella se divulgue información detallada sobre la investigación del crimen de Maldonado y sobre ciertas conexiones atribuidas a Alvarado. Los investigadores cuentan con algunos indicios respecto de los autores materiales del asesinato del prestamista pero, hasta el momento, no hay otros detenidos por el crimen.

Alto perfil

Alvarado gozaba de libertad condicional tras cumplir parte de una condena a 6 años y medio de prisión que le dictó la Justicia bonaerense por comandar una banda dedicada al robo de autos en el conurbano de esa provincia y traerlos a Rosario, donde los cortaban y desguazaban. Había caído por ese delito en 2012.

Desde que recuperó la libertad, su nombre empezó a mencionarse en algunos barrios de Rosario donde era visto con asiduidad. Incluso comenzó a ser investigado ante la presunción de que planeaba retomar el control de parte del negocio narco, vacío tras la condena a los jefes de la banda de Los Monos y otros referentes del ramo.

Pero el pedido de captura que lo regresó tras las rejas fue por el crimen de Lucio Maldonado, un prestamista de 37 años a quien cuatro hombres armados secuestraron frente a su casa de Garibaldi al 600 la madrugada del domingo 11 de noviembre pasado. Lo metieron en una Renault Kangoo y, según los fiscales, lo llevaron hasta una quinta en el paraje Los Muchachos, sobre la ruta A-012, en jurisdicción de Piñero y cerca de la cárcel que hoy aloja a su dueño.

En base a evidencias que seguramente serán detalladas en la audiencia de hoy, se presume que allí mataron a Maldonado. La noche del lunes 12 lo tiraron a la vera de la autopista a Buenos Aires, frente al barrio Las Flores, donde lo hallaron la mañana siguiente. Tenía dos tiros en la espalda y otro en la nuca. En un bolsillo de sus ropas había una nota con una leyenda escrita con fibrón que decía: «Con la mafia no se jode».

En el marco de la investigación, el último día de noviembre de 2018 hubo un procedimiento en la quinta del paraje Los Muchachos que los fiscales consideran propiedad de Alvarado. Allí se incautó documentación que disparó otros 14 allanamientos a inmuebles vinculados con el hombre. Eso incluyó una finca del barrio Funes Hills donde residía su esposa, la sede de una empresa de transportes en zona oeste, una casa donde se buscó a su hermano y un departamento en el complejo Condominios del Alto donde reside el suboficial Javier Macat, quien era subjefe de Inteligencia Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones (PDI) y fue apartado del cargo.

Conectados

Aunque hay distintas hipótesis sobre el móvil del crimen de Maldonado, la Fiscalía considera que existen elementos para imputarle a Alvarado la instigación: estiman poco probable que hayan mantenido secuestrado al prestamista en una vivienda de su propiedad sin el consentimiento de su dueño. En ese sentido, el fiscal Matías Edery dijo los primeros días de diciembre que «el punto de contacto entre Alvarado y Maldonado son los autos. Uno de los elementos que estamos analizando como posible disparador del homicidio es un negocio que no resultó como Alvarado quería o alguna cuestión de dinero», agregó.

En diciembre de 2007 efectivos de Infantería de la policía rosarina detuvieron in fraganti a Alvarado cuando robaba un Fiat Duna en Cochabamba al 800. Entonces trató de extorsionar a los agentes, quienes lo llevaron tras las rejas. Por ese hecho lo condenaron a tres años de prisión condicional. Desde entonces Alvarado, también conocido como «Chuchino» o «Rengo», sólo fue penado en Buenos Aires por el robo de autos para su desguace.

El nombre de Alvarado también apareció como el de un próspero comerciante dueño de una empresa de transporte y como socio del empresario narco asesinado Luis Medina, acribillado a tiros junto a su novia en el acceso Sur y Ayolas el 29 de diciembre de 2012 en un hecho jamás esclarecido. Eso surge de un relevamiento de la Unidad de Información Financiera de 2015 a fin de que se lo investigue por lavado de dinero.

Esteban Alvarado no es el único hombre de su familia con problemas judiciales. Su hermanastro Gustavo «Tuerto» Ramos fue condenado por narcotráfico y en diciembre le allanaron la casa en el marco de la pesquisa por el caso Maldonado. Y su hermana, Yanina Alvarado, está procesada por la Justicia federal, al igual que su pareja, como integrantes de una banda que proveía de cocaína, marihuana y drogas de diseño a consumidores de alto poder económico. (La Capital)