Puerto Madryn: Paro en la actividad pesquera por protesta de marítimos

El gremio bloquea la descarga de mariscos en la ciudad. Los empresarios niegan que haya habido bajas salariales.

Las cámaras de empresarios pesqueros arremetieron contra el Sindicato Obreros Marítimos Unidos (SOMU) por impedir el ingreso de los camiones a descargar langostino a las plantas procesadoras de Puerto Madryn.

La Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (CAPECA), la Cámara Argentina Patagónica de Industrias Pesqueras (CAPIP) y el Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (CEPA) advierten que el bloqueo del SOMU que «genera que cientos de toneladas de pescado estén a punto de desperdiciarse».

La semana pasada, el titular del SOMU, Raúl Durdos, dijo que «la verdadera intención de los empresarios de la pesca es desconocer o eliminar los convenios colectivos de trabajo vigentes para actuar al margen de la ley, aprovechando la emergencia sanitaria y el aislamiento social, preventivo y obligatorio», y denunció un lock out.

Durdos, quien integra la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra), aseguró que las cámaras patronales de forma directa procuran «eliminar» los convenios colectivos históricamente logrados por los sindicatos.

El dirigente gremial explicó que en plena discusión paritaria, las cámaras de la actividad pesquera intentan imponer «la discusión de la vigencia de esas herramientas convencionales y proponen su reforma a la baja», puntualizó.

Las cámaras pesqueras desmintieron que las empresas pretendan pesificar los ingresos. «La propuesta garantiza que el ingreso variable del trabajador pesquero siga atado al dólar» y detallaron que lo que se pretende discutir es «que sea a un valor del langostino más en sintonía a los precios del mercado internacional, y no a valores de hace 14 años», resaltaron.

En ese sentido, sostuvieron que es mentira «que esta discusión se pretenda llevar a todas las especies. Un ejemplo claro en ese sentido es el acuerdo sobre el calamar, que se atendió el reclamo de los trabajadores y se aumentó el cálculo base de sus ingresos».

«Frente a esta situación, el Gobierno nacional intentó establecer una mesa de diálogo, donde circularon distintas propuestas para evitar la profundización del conflicto y que se pierdan los 500 millones de dólares que ingresan al año por exportación de langostino. Sin embargo, las autoridades del gremio respondieron con un paro general y ahora con bloqueo a las plantas procesadoras», agregaron desde las cámaras empresarias.

En tanto, consideraron que «en el actual contexto, el trabajador promedio pretende garantizar su fuente de trabajo, la continuidad de sus ingresos para el sostén de su familia y que su salario no pierda valor. Y hoy, a un mes de haber comenzado la temporada, lamentablemente deben enfrentar la incertidumbre de no saber si van a poder trabajar. En octubre finaliza la temporada, y lo que no se pesque este año, no se pesca más».