Fernández en la apertura de sesiones: “Ningún gobierno de la tierra se puede arrogar el privilegio de no cometer errores»

A lo largo de casi dos horas de discurso, el mandatario nacional recorrió las temáticas propias de la pandemia del COVID-19 y sus efectos sobre la estructura social y económica, pero también refirió a cuestiones relacionadas con la Justicia, la Educación y la deuda externa.

El presidente Alberto Fernández arribó pasadas las 12 del mediodía al Congreso Nacional para brindar su discurso y encabezar la 139na apertura de sesiones ordinarias. Al llegar al recinto, fue recibido por la titular del Senado y actual vicepresidenta, Cristina Fernández.

A lo largo de casi dos horas de discurso, el mandatario nacional recorrió las temáticas propias de la pandemia del COVID-19 y sus efectos sobre la estructura social y económica, pero también refirió a cuestiones relacionadas con la Justicia, la Educación y la deuda externa.

Pandemia de coronavirus 

En primer lugar, Fernández reconoció que «hemos tenido un logro inmenso en el 2020. Evitamos que se colapsara el sistema de salud». En ese sentido, lamentó las «críticas injustas» recibidas por la gestión de la Casa Rosada de la situación sanitaria. «Hubo quienes quisieron incitar banderazos y romper protocolos impuestos con la sola idea de deteriorar la credibilidad de un Gobierno, convencido, que buscaba preservar la salud del pueblo», lamentó.

Respecto a la campaña de vacunación, destacó la producción del compuesto de la AstraZeneca en Argentina, y el cierre del contrato con Rusia. «Hoy el 10% de los países acapara el 90% de las vacunas», indicó.

«Seguiremos consiguiendo las vacunas para cumplir con los objetivos. Hemos iniciado el mayor operativo de vacunación de la historia Argentina. Vamos a avanzar semana a semana con nuestro plan. En este plan, hay prioridades muy claras. La reglas se deben cumplir. Si se cometen errores, la voluntad de este Presidente es reconocerlos y corregirlos de inmediato. Cuando se dijo que aquellas reglas habían sido transgredidas, me he encargado de recabar la información pertinente, aún cuando en lo personal me causara mucho dolor, tomé las decisiones que correspondían», dijo sobre el vacunatorio Vip lo que le valió un fuerte aplauso en el Congreso.

“Ningún gobierno de la tierra se puede arrogar el privilegio de no cometer errores, pero todo gobierno sensible sí tiene la obligación de corregir esos errores para desterrar cualquier indicio de privilegio o falta de solidaridad”, agregó.

Asimismo, refirió también a la cuestión económica en el marco de la pandemia y dijo: «El reproche fue y es definitivamente inmerecido». «Junto al cumulo de demandas sanitarias fuimos capaces de impulsa económicas y de protección social para paliar los efectos de la inédita calamidad que atravesamos», expresó, al recordar la creación del IFE, el congelamiento de tarifas, la prohibición de los despidos y la doble indemnización, las ayudas estatales a las empresas desde ATP y créditos a tasa 0, el aumento de la tarjeta AlimentAR.

Desde ese aspecto, el presidente detalló que la pobreza creció 5.4%, del 35.5% al 40.9%. «Es una situación grave que vamos a revertir. Pero pese a las malas condiciones, creció menos que entre 2017 a 2019», lanzó.

Economía y Deuda externa 

El titular del Estado nacional le dedicó un capítulo destacado a la deuda tomada por el gobierno de Mauricio Macri con el Fondo Monetario Internacional. Adelantó que instruyó a lo abogados del Estado para iniciar una querella criminal contra “los autores de la mayor administración fraudulenta y malversación de caudales públicos de la historia”. También criticó a las autoridades del Fondo Monetario que accedieron a desembolsar USD 55 mil millones.

Y agregó: “He instruido a las autoridades pertinentes para que formalmente inicien querella criminal tendiente a determinar quienes han sido los autores y partícipes de la mayor administración fraudulenta y de la mayor malversación de caudales que nuestra memoria registra”.

“La inquietud que aquí nos planteamos también parece ser compartida en el seno del mismo Fondo Monetario Internacional. Hemos sabido que la Oficina de Evaluación Independiente del organismo, identificó nueve propuestas de investigación entre las cuales está la “política de acceso excepcional” a créditos, destacando un “caso particularmente difícil como la Argentina”, desarrolló.

En otro tramo de su discurso, el presidente abordó su programa económico e hizo hincapié en las políticas empleadas para controlar la inflación.

Sobre ello, anunció el envío al Congreso de un proyecto de ley para «desdolarizar» las tarifas de los servicios públicos y «adecuarlas a una economía que tiene sus ingresos en pesos».

«La pesadilla de tener que decidir entre alimentarse y pagar servicios ha llegado a su fin», afirmó el Presidente al hablar ante la Asamblea Legislativa y dar inicio al período de sesiones ordinarias del Parlamento.

«Enviaré al Congreso un proyecto de ley que declare la emergencia de servicios públicos para desdolarizar definitivamente», dijo Fernández para agregar «que los costos fijos -los servicios públicos- que representan en las familias repercutan cada vez menos en el bolsillo familiar», siempre bajo la premisa de «preservar la sustentabilidad macroeconómica, prevista en el Presupuesto 2021».

Recordó la vigencia del «congelamiento de tarifa» dispuesto al inicio de su gestión y señaló que «es momento de regularizar el sistema tarifario» con la consigna de que las tarifas «deben corresponderse con las necesidades y las capacidades de pago de nuestra gente».

Justicia 

Sobre el final de su alocución, Alberto Fernández cruzó fuerte a algunos fiscales, criticó los privilegios de los jueces y anunció la creación de un tribunal federal con competencia en cuestiones de arbitrariedad.

En ese sentido, anunció que enviará al Congreso proyectos de ley para establecer el «funcionamiento del recurso extraordinario ante la Corte Suprema», además de reformas destinadas a fijar la «exacta competencia del máximo tribunal».

En su mensaje ante la Asamblea Legislativa, el mandatario anticipó además que promoverá un proyecto de ley que «reformula» el funcionamiento del Consejo de la Magistratura para «despolitizar ese ámbito».

«Consultaré con los señores gobernadores, en el marco de lo que sostiene la Constitución Nacional, que se promueva la creación de un Tribunal Federal de garantías con competencia en cuestiones de arbitrariedad. Así, la Corte Suprema podría circunscribir su competencia a lo que la Constitución expresamente le ha dado», dijo al hablar ante la Asamblea Legislativa.