Cristina Kirchner: “El Estado no puede ser estático, tiene que salir y comprometerse con la realidad de la gente”

“Qué clase de capitalismo es este que cada vez tiene menos consumidores. Me quedo con el capitalismo del peronismo, donde todos podían consumir”, dijo la ex presidenta en Rosario.

La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó durante el mediodía de este sábado un acto en la Facultad de Psicología de Rosario, en el marco del 11° Encuentro Nacional de Salud. Además de hacer un repaso de la gestión sanitaria entre 2003 y 2015 –cuando ella y su esposo, Néstor Kirchner, fueron mandatarios– también lanzó críticas al actual Gobierno y dejó entrever algunas opiniones sobre el rol del Estado.

A pesar del feroz sol y del calor, más de 10.000 personas se concentraron en el predio abierto de la ciudad universitaria, más conocida como “La Siberia”. Horas antes ya había una buena cantidad de colectivos estacionados sobre avenida Circunvalación –en las inmediaciones de Pellegrini y 27 de Febrero– y una gran cantidad de militantes que llegaban al lugar en transporte urbano, taxis o vehículos propios.

En un acto que se dice peronista, no puede faltar el choripán: el puesto principal estaba en la entrada a La Siberia. En el camino a la Facultad de Psicología había múltiples gazebos y vendedores ambulantes, mientras que al fondo, sobre un predio abierto, se dejaba ver el escenario.

Pasadas las 12, y con la canción “Fanático”, de Lali, sonando de fondo, Cristina salió escena, ampliamente vivada por la militancia. En primera fila la escuchaban referentes del Partido Justicialista como los santafesinos Germán Martínez, Florencia Carignano, Agustín Rossi y Alejandra Rodenas, mientras que en la mesa que encabeza el panel también se encontraba el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak.

Un dato de color es que el funcionario fue el primero en tomar la palabra. Todos los que estaban sobre el escenario se pusieron de pie para recibirlo, menos Cristina, quien solo se limitó a aplaudir.

“En este mundo líquido e instantáneo donde se olvida lo que pasó antes de ayer, es bueno recordar que hubo un país, entre el 2003 y el 2015, que mejoró el sistema sanitario, la calidad de vida y de la salud de todos los argentinos, sin distinciones. No nos quedamos solamente con la acción a los sectores vulnerables, porque ampliamos el programa médico obligatorio introduciendo la fertilización asistida, que nadie la quería cubrir”, expresó Fernández de Kirchner.

Y añadió: “También sancionamos la ley para que las prepagas no pudieran fijar unilateralmente la cuota, como lo hacen ahora. A los que nos maldicen porque dicen que solamente nos importan los pobres, les recordarnos que mientras estuvimos nosotros pagaron cuotas justas de prepagas, no como ahora que te arrancan la cabeza”.

“La salud es un hecho político y social y requiere un modelo de país donde nos solo funcionen los hospitales, sino que además se construyan las redes de cloacas y agua potable para que la gente no se enferme, para que pueda acceder a una vivienda y para que tengan salarios que puedan hacer frente a la dignidad de la vida”, completó la titular del Partido Justicialista.

A lo largo del acto, Cristina Kirchner también se permitió lanzar algunos “palos” al actual presidente, Javier Milei: “Ni hablar de los problemas de salud mental que crea el temor a perder el trabajo, a que no te alcance la guita, a tener tres o cuatro laburos. A los problemas de salud mental hoy, en Argentina, los podemos ver desde las más altas esferas hasta lo más bajo, ha penetrado transversalmente, y algunos casos parecen no tener cura”.

“Desregularon las prepagas en perjuicio de millones, pero no se animan a desregular los remedios. A ver, Milei, ya que sos tan guapo, desregulá los medicamentos. Los laboratorios argentinos han tenido una rentabilidad extraordinaria en medio de la miseria popular, porque se le cayeron las ventas, pero compensaron esa caída con los aumentos indiscriminados de precios, algunos superiores al 500%, sobre todo para los medicamentos de mayor uso”, desafió, poco antes de hacer un sutil baile mientras la militancia cantaba “Milei, basura, vos sos la dictadura”.

Sobre el Estado

En otros temas, la ex mandataria dejó algunos mensajes para los dirigentes: “No le tengamos miedo a la palabra eficiencia. Tenemos que construir un Estado eficiente, que no esté adentro de los ministerios, sino que salga, que la gente vea que cada empleado está comprometido en su realidad y no lo vean como un ser privilegiado para que después puedan argumentar, los malos gobiernos, su idea de destruir el Estado”.

Y completó: “Los modales, el dedito, la cadena nacional, molestaban porque soy mina un poquito, pero porque gobierno para todos más todavía. Conozco muchas minas que están en el Gobierno, pero gestionan para ellas y un grupo selecto nada más”.

“El capitalismo necesita consumidores, gente que pueda comprar. Qué clase de capitalismo es este que cada vez tiene menos consumidores. Me quedo con el capitalismo del peronismo, donde todos podían consumir”, cerró Cristina, quien, antes de despedirse, recordó que es “pingüina”, dejando ver así que las altas temperaturas la afectan.

Kreplak, Kicillof y la interna peronista

Poco antes de que Cristina suba al escenario, el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, habló ante los presentes: “Ante un Gobierno nacional que le saca recursos al sistema de salud, nos llegan 30% más de consultas porque la población ya no tiene obras sociales o no puede pagar copagos. Tenemos más del 25% de consultas ambulatorias porque los jubilados no pueden buscar medicamentos en las farmacias y tienen que ir al hospital”.

“El Ministerio de Salud de la Nación está abandonando en el VIH, las vacunas, programas de salud sexual y el aborto”, alertó el ministro del gobernador bonaerense Axel Kicillof –quien disputa una interna con la ex presidenta– y cerró: “Cristina, somos tu cuerpo de militancia sanitaria”.