Argentinos que viven en Europa ya radican en Rosario a sus hijos españoles

La gestión fue iniciada por argentinos con un cónyuge español o matrimonios de nacidos en el país que emigraron en la crisis de 2001 y ahora analizan regresar a Rosario.

La sede local de la Dirección Nacional de Migraciones recibió este año treinta pedidos para tramitar la radicación de niños españoles con padres argentinos que evalúan volver a tentar suerte en Rosario. El número da cuenta de un fenómeno mínimo pero novedoso: en años anteriores la cantidad de trámites de ese tipo era «igual a cero», según comparó el titular del área, Daniel Zárate. Para el funcionario el dato refleja un efecto de la crisis económica europea, aunque está lejos de revelar una tendencia masiva o consolidada: «Hay familias que están volviendo, pero no eso no significa que todas se van a quedar acá, muchas lo están analizando», apuntó.

La gestión fue iniciada por argentinos con un cónyuge español o matrimonios de nacidos en el país que emigraron en la crisis de 2001 y ahora analizan regresar a Rosario, ante el avance del desempleo en la península ibérica. Son parejas que tuvieron hijos en España y que este año solicitaron la radicación de los chicos en la ciudad.

El trámite permite la estadía precaria por 90 días en Argentina, mientras Interpol verifica la documentación. Luego se entrega el permiso transitorio y a los dos años la radicación definitiva, acompañada del DNI de extranjero. En el caso de los chicos españoles los padres pueden simultáneamente tramitar la ciudadanía en el juzgados federales porque ambos países tienen convenios que permiten la doble nacionalidad.

«Hemos recibido casos de matrimonios argentinos o mixtos que están pidiendo la radicación para sus hijos», apuntó Zárate, para quien el registro es «novedoso» porque no recibían pedidos de ese tipo en años anteriores. «El trámite es muy sencillo para ellos porque se otorga con el criterio de reunificación familiar, con la sola documentación que confirme el vínculo de casamiento y la partida de nacimiento española de sus hijos donde conste que son hijos de un argentino», agregó, y aclaró que el retorno, para muchas de esas parejas, no es aún una decisión tomada.

«Muchos están evaluando volver, aunque no es fácil instalarse otra vez para aquel que se fue a tentar una nueva vida, dejando atrás a toda su familia, sus amigos y su barrio. Lo que comentan en general es que lo están evaluando», señaló. El dato es un indicador sobre el regreso de argentinos desde España, un fenómeno difícil de medir y que de todos modos no es aluvional: según datos de la Consejería de Empleo y Seguridad Social de la Embajada de España en Buenos Aires, el retorno se da en cuentagotas.

«Los argentinos en España están plenamente integrados. No se está dando una situación de regreso como consecuencia de la crisis y tampoco una nueva migración laboral de españoles hacia esta región. Son dos tenencias que tenemos muy claras, con independencia de lo que algún medio de comunicación haya informado o cifras que han tomado una mayor dimensión», observó el titular de la Consejería, Julio Olmos.

«No tenemos una percepción de que a Argentina en general y Rosario en particular estén viniendo españoles. Los jóvenes han optado por Alemania, Gran Bretaña y Francia. Hay casos concretos, por lo general de personas que ya tenían una relación con el país o una pareja argentina, pero que no son significativos estadísticamente», analizó.

También planteó que no es masivo el regreso de argentinos: «Hay más de 150 mil viviendo en España que están muy bien integrados». Si bien la entidad no lleva registro de esos casos, el consejero apuntó que en los últimos dos años volvieron entre 1.500 y 2.000 personas como resultado del programa de retorno voluntario de inmigrantes, una ayuda de 12 mil euros para desempleados o personas en situación de vulnerabilidad social.

(La Capital)