La Cámpora, el Movimiento Evita y la Corriente Nacional de la Militancia recordaron al «Tío»

El kirchnerismo recordó el 39º aniversario del triunfo electoral del 11 de marzo de 1973 con una convocatoria a llenar el estadio de Vélez Sarsfield el próximo 27 de abril. Reunidos en San Andrés de Giles, el pago chico de Héctor Cámpora, a quien se homenajeó en el mausoleo que guarda sus restos, dirigentes y miembros de La Cámpora, el Movimiento Evita y la Corriente Nacional de la Militancia se comprometieron a reunir “más de 100 mil personas” en la cancha de Vélez en un acto en el que la principal oradora será, como corresponde, la presidenta Cristina Fernández. Según anunciaron ayer el jefe del bloque del Frente para la Victoria en Diputados, Agustín Rossi; el secretario general de La Cámpora, Andrés Larroque; y el diputado bonaerense Fernando “Chino” Navarro, el objetivo de la concentración será ratificar el alineamiento del oficialismo bajo la conducción de Cristina y, también, dar un paso fuerte y visible hacia la unidad de todos los sectores kirchneristas.

La convocatoria tenía como objetivo homenajear a Cámpora y conmemorar la victoria que llevó a la presidencia a la fórmula del Frente Justicialista de Liberación, que en 1973 integraban Cámpora, “el Tío”, y Vicente Solano Lima, del conservadurismo popular. Unas 300 personas, entre dirigentes y militantes, llegaron hasta San Andrés de Giles, a más de 60 kilómetros de Buenos Aires. Entre las caras conocidas, que fueron muchas, estuvieron Rossi, Navarro, Larroque, el senador Daniel Filmus, el diputado Carlos Kunkel, el ex canciller Jorge Taiana, el publicista Jorge “Topo” Devoto, el encuestador Ricardo Rouvier, entre otros. La jornada comenzó con un homenaje a Cámpora en el cementerio municipal de San Andrés de Giles. Bajo el impiadoso sol del mediodía, que hacía transpirar por igual a jóvenes y veteranos, se escucharon palabras emotivas y análisis fríos –con cierta dosis de humor– sobre las contradicciones entre la juventud maravillosa y los sectores ortodoxos en el peronismo de los setenta. En ese tema, Kunkel se llevó todos los aplausos (ver aparte). Tras el reconocimiento al ex presidente que hizo posible el regreso de Perón, la multitud se movilizó hasta la estancia La Cándida López, ubicada en el kilómetro 64,5 de la Ruta 41.
Una vez en el campo, dirigentes y militantes se ubicaron en largas mesas dispuestos a escuchar los discursos y a compartir un asado de chancho con cuero, un plato típico de esa zona de la provincia de Buenos Aires. Sentados en la cabecera, Filmus, Juan Pablo O’Dezaille (Frente Transversal), Blanca Osuna (intendenta de Paraná), Mariano West (jefe comunal de Moreno), Navarro, Larroque y Rossi fueron turnándose en el micrófono. Todos recordaron las medidas de transformación llevadas adelante por Cristina, a la que reconocieron como “la única conductora del proyecto nacional y popular”. También se escucharon advertencias sobre los cuestionamientos de “la derecha” a las políticas oficiales. “Buscan sembrar confusión ideológica para dividirnos. No hay que subestimarlos, estemos atentos. Están intentado desgastar la legitimidad de este gobierno, que hace tres meses obtuvo el 54% en las urnas”, avisó Rossi.
Sin referirse de modo explícito a la problemática ferroviaria, Navarro advirtió que esas deudas del modelo, “que nos duelen”, debían entenderse en el marco de 60 años de destrucción del Estado. “No nos confundamos, la derecha no nos critica por lo que estamos corrigiendo. Nos critican por lo que hicimos bien. Y se aprovechan de esas situaciones para intentar debilitarnos”, subrayó el dirigente del Movimiento Evita. Larroque recordó la proscripción de 18 años que había padecido el peronismo para hacer un parangón con la “proscripción mediática” que tuvieron que enfrentar Néstor Kirchner y Cristina entre 2008 y 2011. “Y logramos vencer esa proscripción con el 54% de los votos, con el apoyo del pueblo argentino”, festejó el diputado entre aplausos.
En el asado se escucharon críticas al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, por rechazar el traspaso de subtes y colectivos a la Ciudad Autónoma. Esa decisión, pronosticaron algunos oradores, le traerá problemas para “federalizar” el PRO, que hasta ahora es sobre todo una fuerza municipal. “Los legisladores de las provincias van a expresar con su voto que no quieren que los subtes y colectivos de la ciudad de Buenos Aires sigan siendo pagados por todo el país”, vaticinó Guillermo Carmona, diputado nacional por Mendoza. Organizado por el Movimiento Evita, La Cámpora y La Corriente Nacional de la Militancia, el homenaje a Cámpora juntó a dirigentes que habían vivido los años ’70, como el diputado de extracción sindical Carlos Gdansky, hombre fuerte de la UOM de La Matanza y ex delegado de base en la metalúrgica Santa Rosa en 1973, con jóvenes que hoy encarnan el retorno de la juventud a la militancia política: los diputados nacionales Eduardo “Wado” De Pedro y Mayra Mendoza (ambos de La Cámpora), como también Leo Grosso (JP Evita). Los tres tienen menos de 40 años. La actividad tuvo un aporte mayoritario de dirigentes y militantes bonaerenses. Por la Legislatura estuvieron Navarro, el camporista José Ottavis –vice de la Cámara de Diputados–, el senador provincial Eduardo “Cholo” Ancona (Movimiento Evita) y el diputado bonaerense Miguel Funes (también de La Cámpora).
Antes de largarse a comer, los oradores insistieron con la convocatoria para el 27 de abril en la cancha de Vélez. Confeso hincha de San Lorenzo, Navarro exhortó a todos los militantes a “dejar todo en la cancha”, como el día anterior había hecho el futbolista Leandro “Pipi” Romagnoli, para permitir el triunfo del equipo de Boedo por 2 a 1. “El 27 de abril vamos a ser más de 150 mil personas en Liniers”, prometió. El acto en Vélez podría ser el primer paso para el surgimiento de una nueva organización, que represente más cabalmente al proyecto político que llegó al gobierno en mayo de 2003. (Tiempo Argentino)