Con rotación obligada Newell’s recibe a Velez por una nueva fecha del campeonato doméstico

Newell’s está metido de lleno en una maratón de partidos. Así será hasta mediados de mayo cuando se corten las competencias en cada rincón del Globo por la disputa del Mundial de Brasil. El calendario no da tregua. Los jugadores no llegan a desatarse los cordones de los botines que enseguida deben volver a realizar el nudo para salir a la cancha. Los rojinegros el jueves golearon a Nacional de Montevideo, el domingo igualaron con Estudiantes en La Plata y hoy, en esta minisemana de seis días, tienen una parada chivísima desde las 22.10 ante el temible Vélez, que conduce el Turu Flores.

Claro que el rival también llega con una importante seguidilla encima. Por ello tal vez el encuentro no tenga el vuelo futbolístico que pueden entregar estos dos equipos si están en plenitud física. En consecuencia, la clave puede estar en la dosificación de energías, en la administración inteligente de la pelota y en la concentración de los defensores en las respectivas áreas. No es excusa, pero es imposible proyectar el desarrollo de esta noche sin tener en cuenta esta saturación en la agenda que atraviesan dos de los mejores exponentes del fútbol argentino.

Para Newell’s no contar con Maxi Rodríguez, Ever Banega, afectados a la selección Argentina, ni Marcos Cáceres, lesionado, ya de por sí es un gran inconveniente. Son tres titulares inamovibles en la estructura de Berti y justamente el DT deberá disimular con los recursos que tiene a mano estas bajas para mantener la competitividad.

El aliciente es que ante el Pincha tampoco estuvieron la Fiera ni Ever, y el equipo no se desplomó y jugó de igual a igual. Incluso en el final estuvo a punto de ganar.

Newell’s y Vélez no saben especular. Tratan de jugar de la misma manera en todas las canchas. Y hoy no será excepción. La principal fortaleza de la visita es la movilidad y la contundencia de los delanteros. Entregarle espacios puede ser fatal porque por lo general cuando pisan el área no perdonan.

A favor de Newell’s está la inclaudicable entereza para buscar siempre imponer las condiciones del desarrollo. Además llega con el ánimo en alza por la seguidilla de cuatro juegos sin derrotas y porque logró, con las irregularidades lógicas, reconciliarse con el estilo de posesión y ataque.

La noche del Coloso verá frente a frente a dos equipos nobles y ambiciosos. Está el atenuante de que vienen con los músculos cargados, pero eso no los aleja de intentar jugar y buscar la victoria. Eso los llevó a conseguir objetivos importantes. Y Newell’s quiere seguir levantando la vara de los objetivos en todos los frentes que disputa.

(La Capital)