Zamarini: «Rosario está inmersa en una situación de emergencia de pobreza»

El presidente del Concejo Municipal, que lideró hoy un debate sobre la problemática social en la ciudad, reclamó un acuerdo general para abordar la cuestión.

“Rosario, así como el país, está inmerso en una situación de emergencia de pobreza y tenemos que tener un plan para combatirla en el corto plazo», aseguró el titular del Concejo Municipal, Migue Zamarini, en el marco del debate sobre la problemática social de la ciudad que se llevó a cabo hoy en el Palacio Vasallo.

«Esto no se va a solucionar si gana un candidato o pierde otro. Necesitamos de un acuerdo general que contemple a todos, no sólo los partidos políticos, sino de las organizaciones sociales que nos fortalecen día a día”, advirtió Zamarini, quien se desempeñó como secretario de Promoción Social durante la crisis de 2001.

Asimismo, enfatizó: “Debemos sostener un programa integral, nutricional y pedagógico de estimulación temprana para que, cuando los niños lleguen a la etapa de nivel inicial, tengan igualdad de oportunidades y puedan desarrollarse en las condiciones que realmente se merecen. No vamos a descansar hasta que en Rosario haya inclusión e igualdad”.

Con un recinto de sesiones colmado por más de 300 representantes de sindicatos, clubes, asociaciones civiles y ONGs, se llevó a cabo un debate sobre la pobreza en el municipio que se extendió durante tres horas y que reveló una realidad de la que se agudiza y preocupa, sobre todo, en los barrios y la periferia rosarina.

“Desde hace años que la ciudad ha cambiado su eje y dejó la mirada industrial para pasar al modelo turístico. Hay fábricas que se han trasladado a otras ciudades e incluso a diferentes provincias. Y eso genera desempleo y, por ende, es un causal importante de pobreza”, señaló el concejal radical Martín Rosúa.

Además, Rosúa mencionó como una de las cuestiones claves la “institucionalidad absolutamente débil”, para marcar también como factores que agravan la situación, “cuando un comercio cierra por la inseguridad, y se pierden fuentes de empleo; o una pequeña y mediana empresa no puede crear más empleo porque la presión fiscal los asfixia o una gran empresa multinacional, que no puede enviar dividendos al exterior”.

Entretanto, el diputado provincial Julián Galdeano opinó: “El gobierno nacional niega la pobreza como niega la inflación. Los diez años de kirchnerismo nos dejan una marginalidad y desigualdad social persistente. Una política social caracterizada por la ineficiencia, la corrupción y el clientelismo”.

“Entre los objetivos se destaca el de disminuir la dependencia de amplios sectores de nuestra sociedad de los planes sociales”, afirmó Galdeano, quien sostuvo: “Hoy estamos ante un verdadero estancamiento social. Quien nace pobre, difícilmente pueda modificar su condición”.

(La Capital)