La vacuna contra el cáncer de útero será obligatoria y gratuita

La presidenta, Cristina Fernández, anunció anoche que el ministerio de Salud incorporará la vacuna contra el cáncer de útero en el plan médico obligatorio para dar cobertura gratuita a todas las mujeres del país.

La vacuna protege al organismo contra las cepas del virus del papiloma humano (HPV), que se transmite en las relaciones sexuales, y son responsables de los cánceres de cuello de útero que puede terminar con la vida de las mujeres.

Según los consejos médicos, la dosis debe ser aplicada a las niñas de 10 años en adelante, ya que es la manera en que estarían cubiertas al iniciar sus relaciones sexuales a una edad más avanzada.

La vacuna será incluida en el plan de asistencia médica obligatoria de la cartera que preside Juan Manzur, por lo que en los próximos meses podrá ser aplicada a las pacientes en forma gratuita en los hospitales públicos de todo el país.

Un flagelo

«Esta vacuna, que hoy está a la venta y sólo al alcance de unos pocos, ahora va a formar parte del calendario de vacunación y va a permitir que miles de mujeres no pierdan la vida por esta causa», dijo la mandataria.

Al presentar el Instituto Nacional de Medicina Tropical, en la Casa Rosada, la jefa de Estado resaltó que el cáncer de útero es un flagelo que ataca a las mujeres y que provoca más de dos mil muertes por año.

«Es la segunda causa de muerte por cáncer la del cuello uterino», aseveró la Presidenta y aseguró que con la aplicación gratuita de la vacuna su administración busca «que la salud no sea un privilegio de los que tienen plata, sino de todos».
Costo elevado

Hasta ahora, se comercializaban varias marcas de esta vacuna en las farmacias de todo el país, pero su alto costo (tres dosis de 430 pesos cada una) impedía que las mujeres de escasos recursos económicos pudieran acceder a ella.

Incluso, los médicos especializados llegaron a señalar al cáncer de útero como una de las enfermedades íntimamente ligadas a la pobreza, no por sus causas sino por el desenlace.

La enfermedad mata a más de 2.300 mujeres cada año en el país, pero el 95 por ciento de las que mueren son las que no tienen acceso a los servicios de salud, las que no se controlan porque ignoran que deben hacerlo o aquellas que no tienen los medios para llegar y luego pagar las dosis del medicamento. (NA)