El reparto de la «talanga” en el Mundial de Rusia

Al momento en que esta columna va tomando forma, el orbe está viviendo las últimas instancias deportivas de la undécima Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018.

Es la primera competencia futbolística que se celebra en Europa del Este y también la primera que tiene lugar en Asia, dada la posición geográfica de una de las sedes: La ciudad de Ekaterinburgo.

Se ha estimado un costo de 14.2 mil millones de dólares, esto es el más caro de la historia de los mundiales y es la primera Copa que utiliza el Asistente de Video para Árbitros (VAR).

El entonces primer ministro ruso Vladimir Putin, -hoy titular del Estado-, recién tras la elección de Rusia como sede, ordenó el proyecto de construcción de los nuevos estadios.

Y cuando los trabajos ya estaban avanzados, a Asociación Inglesa de Fútbol hizo trascender que había denuncias por sobornos y casos de corrupción, e incluso se alegó que miembros de la Federación Internacional del Fútbol Asociado estaban siendo investigados.

Luego comenzó a escucharse con insistencia acerca de un informe dirigido por Michael García, el que habría sido ocultado al gran público por un dirigente de apellido Eckert, quien se desempeñó en el área de adjudicación de la FIFA, más precisamente en el sector de Asuntos Éticos.

Eckert, me dicen, en cambio publicó un resumen más corto y su renuencia a publicar un informe completo causó que García renunciara. La situación derivó en un llamado a un boicot a la Copa del Mundo.

Rusia confirmó al final de espurio proceso a 11 ciudades y 12 estadios, de los cuales sólo 2 estaban totalmente terminados al momento de su elección como sede, teniendo la sede principal una capacidad de 81.300 espectadores.

El número de voluntarios inscriptos para colaborar en la organización del mundial batió todos los récords, esto es 177.000 solicitudes, de los cuáles fueron elegidos 17.040 colaboradores para el Comité Organizadores, mientras otros 18.000 se desempeñaron en las ciudades anfitrionas del torneo.

Fueron formados en 15 centros que funcionaron en 15 universidades, siendo las prioridades consideradas para la elección la responsabilidad personal, la experiencia y los conocimientos en lenguas extranjeras.

Los premios

La competencia repartirá un total de 400 millones de dólares en premios entre los equipos participantes según su clasificación final. Los equipos que no pasen la primera fase se llevarán 9 millones de dólares; para los que ingresen a octavos de final, se llevarán 12 millones, mientras que los que pasen a los cuartos de final conseguirán embolsar 16 millones.

El cuarto lugar tendrá signados 22 millones de dólares; el subcampeón 28millones y el campeón 38 millones de la moneda norteamericana.

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Ricardo Marconi

Licenciado en Periodismo. Posgrado en Comunicación Política. rimar9900@hotmail.com