Tres clínicas en proceso preventivo de quiebra en la ciudad

Empleados de la salud privada están en alerta. La delicada realidad económica también jaquea a hospitales de San Lorenzo y Venado Tuerto.

Empleados de la salud privada están en alerta porque cinco sanatorios privados de Rosario, San Lorenzo y Venado Tuerto iniciaron procedimientos preventivos de crisis. Según señaló el secretario de general de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad (Atsa), Marcelo Liparelli, se trata de clínicas vinculadas a Pami. Por la crisis, Liparelli dijo que peligran cerca de mil puestos de trabajo, pero que hasta el momento no hubo despidos ni retrasos en los salarios.

“Son sanatorios y clínicas con internación. Hubo retraso en los pagos de Pami y de otras obras sociales. Los trabajadores aún están recibiendo el 100 por ciento del salario y no hubo pérdida del poder adquisitivo. Pero el miedo es que la situación se agrave y haya despidos”, explicó.

Liparelli no quiso especificar cuáles eran las clínicas en situación de crisis para no alarmar. Pero El Ciudadano pudo saber que se trata del ex hospital Italiano (Virasoro 1249), la clínica Sur (Arijón 152) y la San Felipe (Ameghino 953), todas de Rosario. También el Sanatorio Regional de San Lorenzo y la clínica Castelli de Venado Tuerto.

“Seguimos en estado de alerta porque ante la crisis que dicen tener algunos sanatorios debemos estar firmes en defender la fuente laboral de unos mil compañeros”, aseguró el dirigente gremial.

Tras eso destacó que, pese a la crisis, lograron un buen cierre de paritarias, en la que acordaron un 27.5 por ciento de aumento salarial.

Liparelli señaló que el problema de los sanatorios se debe a los retrasos en los pagos de Pami, que se suman a la baja en el volumen de ingresos desde que la obra social implementó el sistema de pago por capitas.

Según el sistema que funciona desde abril de 2017, Pami paga a las clínicas un monto fijo por afiliado, en reemplazo del pago por práctica.

Para el dirigente gremial, la modificación del sistema de pago bajó el volumen de ingresos en los sanatorios.

“El panorama no es muy alentador por eso le pedimos a las centrales obreras nacionales que tomemos la calle para repudiar las políticas de ajuste del gobierno nacional”, señaló Liparelli. Igual, aclaró que por el momento no van a tomar ninguna medida de fuerza concreta. (El Ciudadano)