Videla: «Muchos peronistas colaboraron lealmente con nuestro gobierno»

Lo afirmó el ex dictador Jorge Rafael Videla, en la tercera parte de una entrevista concedida a una revista española. Dijo que la Junta militar mantuvo relación con todos los partidos políticos, y calificó como «exitosa» la gestión de la dictadura

Videla resaltó que su Gobierno mantuvo la existencia de todas las fuerzas políticas, y que sólo suspendió la actividad partidaria.

«Esta situación se daba por primera vez en la Argentina, donde, por norma, los gobiernos de facto disolvían a los partidos políticos, al momento de hacerse cargo del poder. Incluso se permitió que los integrantes de los distintos partidos políticos desempeñaran cargos de embajadores, gobernadores, intendentes, integrantes del poder judicial, etc», señaló el genocida.

Pese a que aclaró que «el partido peronista no gozó de esa ventaja, dado el desprestigio que habían acumulado sus dirigentes en el ejercicio del gobierno que resultó depuesto», admitió que «muchos de sus integrantes colaboraron lealmente con nuestro gobierno, en relación con la guerra interna librada contra el terrorismo».

Videla, quien se encuentra detenido por sus crímenes de lesa humanidad durante la dictadura, cuestionó también al ex jefe de la armada, Emilio Massera, al que calificó como «inoportuno» por sus «ambiciones políticas», lo que, dijo, «constituía un grave riesgo en medio de una guerra interna cuyo éxito radicaba en la cohesión de las tres fuerzas armadas que constituían nuestro ejército».

Al hacer un repaso por su gestión, Videla no dudó en calificarla como «exitosa», porque «se ajustó a las normas reglamentarias en vigor».

«Dada la situación de guerra interna que vivía el país,la Junta resolvió, por unanimidad, y con carácter de excepción, que el cargo de la presidencia fuera desempeñado por mí, con retención de mi cargo de Comandante General del Ejército. A mediados de 1978, con la subversión dominada, aquella excepcionalidad había quedado superada y la Junta resolvió, por unanimidad, nombrarme presidente de la nación, coincidentemente con mi pase a situación de retiro, lo que se denominó como el “cuarto hombre”, detalló.

Por último, calificó a las relaciones con los Estados Unidos como «maduras», aunque admitió que hubo «problemas» por la disputa que mantenía conla UniónSoviética, y con la cuestión de los Derechos Humanos. (Infobae)