Joven de 18 años detenido por el asesinato de «Quemadito»

El joven admitió haber intercambiado mensajes de texto con la víctima el día del homicidio. Ya había dos procesados como coautores. El detenido fue indagado ayer a la tarde por el juez de la causa.
Un chico de 18 años fue detenido ayer acusado de participar del asesinato de Maximiliano «Quemadito» Rodríguez, el joven de 26 años ultimado de un disparo en la nuca en Pellegrini y Corrientes en febrero pasado. Una serie de mensajes de texto intercambiados en los momentos previos a la ejecución por el joven apresado y la víctima, interceptada por la investigación judicial, fue decisiva para el arresto.

El joven detenido fue indagado ayer a la tarde por el juez de Instrucción Nº 9, Javier Beltramone. Fuentes tribunalicias indicaron que el muchacho aceptó declarar para desligarse de la acusación que atribuyó a una confusión de los investigadores. Quedó detenido y comunicado. Su identidad no trascendió a este diario.

Por el homicidio ocurrido la tarde el 5 de febrero en Corrientes y Pellegrini ya estaban procesados Héctor David «El Porteño» Rodríguez y Sergio Federico «Chuno» Acosta, detenidos unos cuarenta días después del crimen. El juez Beltramone los consideró presuntos coautores del delito de «homicidio triplemente calificado por el uso de arma de fuego, alevosía y con el concurso de dos o más personas».

Sin embargo, la investigación del hecho que para el juez estuvo enmarcado en el «narcotráfico, el lavado de dinero y una permanente disputa por el supuesto control de la barra de Newell’s» continuó.

Mensajes. Hace unas semanas surgió el rastro del chico detenido e indagado ayer. Esa seña apareció en un cruce de mensajes de texto entre el «Quemadito» Rodríguez y este muchacho de 18 años.

Según fuentes allegadas a la causa, este chico admitió haber conocido a Rodríguez. Incluso, dio pormenores que dan por indudable esa cuestión y aceptó que el día del crimen le había pedido al «Quemadito» encontrarse con él. Sin embargo, durante la indagatoria el joven repitió con serenidad que lo estaban incriminando por error.

En los mensajes de texto aludidos, el chico indagado ayer le pedía con insistencia a Rodríguez una reunión que fue acordada en su departamento, ubicado a diez metros de donde lo asesinaron. Fueron varios mensajes en los cuales el ahora imputado le decía que asistiría a ese encuentro con un joven que tiene idéntico nombre de pila que uno de los dos procesados por el asesinato.

Buscado. Maximiliano Rodríguez fue asesinado a las 18.30 del martes 5 de febrero mientras caminaba con su novia por Corrientes y Pellegrini. El muchacho años se desplazaba con ayuda de muletas como consecuencia de una feroz balacera que había sufrido una semana antes.

Se presume que el joven estaban al tanto de que lo buscaban para asesinarlo cuando recibió en la cabeza un certero balazo calibre nueve milímetros.

Antecedentes. Hasta ese momento el muchacho asesinado era conocido por ser el «Hijo del Quemado» Sergio Rodríguez, el principal imputado por el triple crimen ocurrido el 1º de enero en la villa Moreno precisamente luego de que Maximiliano fuera baleado mientras se encontraba en un auto de alta gama con su novia.

También se había mencionado su nombre entre quienes habían agredido, la noche del 4 de septiembre de 2010, a Diego «Panadero» Ochoa. En esa ocasión el jefe de la barra brava de Newell’s había sido bajado a trompadas del paraavalanchas.

Esos violentos episodios fueron tenidos en cuenta por Beltramone a la hora de procesar a Rodríguez y Acosta. Por ejemplo, el padre de Rodríguez le había dicho al magistrado que el crimen de su hijo había sido perpetrado por allegados a Ochoa que habían cobrado por cometer el crimen. También había revelado sus identididades y afirmado que se encontraban «refugiados» en Mar del Plata.

Además el juez tuvo en cuenta en su momento testimonios como el que señalaba que quienes dispararon se habían escapado en una moto Honda Tornado blanca similar a una luego incautada en la casa del procesado Acosta.

Beltramone también determinó, por otra parte, que «Chuno» es socio de Newell’s y que «El Porteño» era una persona de «extrema confianza» de Ochoa.

En este sentido, el juez había relacionado al «Panadero» con la defensa de del «Porteño», razón por la cual Ochoa se presentó en el juzgado días después de conocido el procesamiento. Entonces el jefe de la barra ñulista declaró ante Beltramone y se desvinculó del homicidio.

«Llamé a un amigo en común que tengo con David P. y no David Rodríguez. El quería viajar a Venezuela para ver el partido que Newell’s jugó con Deportivo Lara por la Copa Libertadores, pero como le habían allanado la casa quería saber si podía hacerlo. Entonces le comenté que el abogado iba a averiguarlo en la Dirección de Migraciones y en los Tribunales», declaró entonces el «Panadero» según reportó en esa oportunidad uno de sus abogados.

Reparto de tareas. En su resolución Beltramone también había sostenido que los dos jóvenes procesados «actuaron con un claro dominio funcional del hecho y habiendo un reparto de tareas». Y también había aclarado que al momento de procesarlos que el plan criminal todavía no se había terminado de establecer en su totalidad en cuanto a autores intelectuales y partícipes necesarios.

Con la detención de ayer, este crimen que conmocionó a decenas de transeúntes que esa tarde circulaban por una de las esquinas más concurridas del macrocentro tiene un nuevo imputado. (La Capital)