Los asaltos a colectivos no cesan y el uso de cámaras es inminente

Un chofer de la línea 102 fue asaltado con un cuchillo y otro conductor de la 146 fue atacado con una modalidad similar.

El asalto con cuchillo a un chofer de la línea 102, de la empresa Rosario Bus, puso nuevamente de manifiesto el tremendo grado de vulnerabilidad que sufren los trabajadores del transporte urbano de pasajeros. Con hechos de inseguridad que se repiten en toda la ciudad, y una situación de gran preocupación y angustia que se expande, el llamado a licitación para implementar el sistema de cámaras de videovigilancia arriba de los colectivos, que se había propuesto por parte del ministerio de Seguridad provincial en marzo pasado, es inminente, ya que se está realizando la etapa final del pliego correspondiente.

Mientras tanto, los actos de violencia y los delitos se suceden con continuidad. Es más, según los dirigentes sindicales, hay entre 5 y 6 robos por semana a bordo de los ómnibus de la red local, y por eso existe un marcado estado de necesidades y expectativas por alguna medida que ayude a enfrentar esta delicada situación.

«Cuando no hay una agresión importante al conductor, generalmente las denuncias no se hacen, pero hay un promedio de 5 o 6 robos por semana», aseguró Manuel Cornejo, secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA).

Si bien desde las bases no es considerada como una solución de fondo, la incorporación del sistema de videocámaras sobre los colectivos permitiría al menos aumentar las condiciones de seguridad de los choferes, quienes continúan sufriendo ataques y asaltos en forma permanente mientras conducen.

En el mes de marzo, luego de que un trabajador de la línea 146 fuera salvajemente baleado por dos jóvenes delincuentes en la zona de Ayolas y Esmeralda, el Ministerio de Seguridad provincial le había propuesto a la UTA la chance de instalar este tipo de cámaras, pero hasta el momento hubo sólo algunos avances significativos.

De aquella reunión que se desarrolló en la sede del Ministerio de Trabajo participaron representantes de la UTA, de la Secretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad, y del Ministerio de Seguridad provincial, y en aquel momento se prometió que se iba a avanzar con este tema.

«La verdad es que para nosotros quedó en promesa. Hasta ahora no tuvimos más novedades formales al respecto por parte del gobierno provincial, ni tampoco de la Municipalidad», confió Cornejo, quien además se mostró escéptico sobre los efectos de la implementación de este sistema. «Yo no creo que sea una solución definitiva. Porque cuando te filman, es porque ya te robaron. Aunque puede que las cámaras sirvan un poco de intimidación a los delincuentes. Hace falta una respuesta, una solución integral, de fondo», exclamó con cierta incredulidad.

Más allá de todo, el proceso de licitación se encuentra atravesando una etapa de estudios técnicos, averiguaciones de costos y diálogos con los posibles oferentes. Este proceso recaerá en la elección de la empresa que abastecerá este sistema acordado. Es la instancia final de la conformación del pliego.

En la noche del martes pasado, tres hombres armados con un cuchillo atacaron al chofer de la línea 102 y se llevaron sus objetos de valor y sus pertenencias. El asalto se produjo alrededor de las 20 en el barrio Parque Casas.

Relato. Según lo relatado por el conductor de la unidad, estas tres personas subieron al ómnibus en Cristalería, y cuando la unidad atravesó la zona de Casiano Casas y Baigorria, hicieron uso del arma blanca con la que le sustrajeron las cosas al chofer.

Uno de los malvivientes le provocó un leve corte al conductor en la cara con el arma blanca, tal como relató el trabajador de Rosario Bus en la declaración que efectuó en la comisaría 30ª, que actuó por razones de jurisdicción.

A este caso, se sumó otro caso en las primeras horas de ayer, en el que un chofer de la línea 146 sufrió un asalto en la punta de recorrido, con una modalidad muy similar.

«Ahora te asaltan en cualquier barrio»

El manto de inseguridad cubre toda la extensión de la ciudad. Según los representantes sindicales de los choferes de colectivos, ya no hay zonas más proclives que otras. «Esto es un sufrimiento permanente que no tiene horarios y afecta a todos los barrios de la ciudad de igual manera. Antes era en la periferia, en lugares más alejados, ahora te asaltan en cualquier lado, en cualquier barrio», comentó Cornejo, secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), de Rosario.

De acuerdo a lo relevado diariamente a bordo de las unidades del transporte urbano de pasajeros, queda claro que los hechos delictivos y de violencia lamentablemente son propiedad común de todos los rosarinos. «Lo que nos pasa a nosotros arriba de los colectivos, también le pasa al ciudadano común que camina las calles de la ciudad. Te roban en pleno centro o en un barrio alejado. Esto cada día se pone peor y lo voy a seguir sosteniendo», afirmó con signos de verdadera preocupación Cornejo.

Lo curioso de lo que sufren los conductores de ómnibus es que no manejan plata en sus manos. Sin embargo, los delincuentes siguen ubicándolos como blancos reiterados de robos menores.

«Es increíble, los ladrones suben a los colectivos y si no le roban al chofer, lo hacen con el pasajero que se traslada a su casa. Te llevan el celular, unas zapatillas, lo que quede al alcance», se quejó con bronca el dirigente sindical.

(La Capital)