Central cambia nombres y esquema

Leo Fernández confirmó los ingresos de Tobio y Herrera por Maxi González y Carrizo, además del cambio en el dibujo táctico, que esta vez será con enganche definido

La posibilidad de repetir equipo no iba a atentar contra a idea de Leonardo Fernández de meter mano de cara al partido de mañana ante Chacarita. Una variante estuvo dentro de la lógica, al menos de lo que se esperaba: el ingreso de Fernando Tobio (cumplió una fecha de suspensión). La otra estuvo acompañada de cierta cuota de sorpresa. Es que quien quedó al margen fue Maximiliano González, lo que motivó un reordenamiento táctico para que Germán Herrera también hiciera su aparición entre los once, en lugar de Federico Carrizo. Y en este último punto quizá esté lo más importante de lo que dejó el ensayo táctico de ayer, en el que el entrenador volvió a modificar el esquema. De aquel 4-5-1 que puso en cancha contra Vélez pasó a un 4-3-1-2, con Joel López Pissano bien parado en la posición de enganche, que obedece a la lectura que el cuerpo técnico hizo de cómo se mueve y por dónde es más vulnerable el rival. Y otro dato importante: José Luis Fernández sigue, pero en la posición de volante por el sector izquierdo.

A todas luces lo más trascendente fue la vuelta de tuerca que Leo Fernández intentó darle al equipo desde lo táctico. Indudablemente en el medio hay una clara pretensión de su parte de vulnerar a Chacarita apostando a una cuota mayor de fútbol.

Fueron cuatro tiempos de entre 9 y 10 minutos cada uno, en los que el técnico paró el juego en reiteradas ocasiones. Las indicaciones fueron principalmente para los delanteros y los volantes, a quienes les remarcó las formas y los tiempos en los cuales ejercer la presión. En el tercer intervalo el diálogo puntual fue con Lioi, López Pissano y Gil.

No fueron muchas veces las en las que Leo Fernández apostó por un enganche. Se recuerda su primer partido (ante Talleres), cuando Carrizo arrancó en esa posición, pero aquel formato duró apenas 45 minutos (en el entretiempo corrigió y el equipo se paró con dos líneas de cuatro). Y entre todos los nombres que había para hacerle un lugar a Herrera, el de Carrizo es el que salió sorteado. A esta altura ya es claro que Leo Fernández no ve al Pachi en su mejor momento.

Lo de Herrera fue claro. Se paró bien adelante haciéndole compañía a Fernando Zampedri, quien en el último partido tuvo que arreglársela solo con los defensores rivales. Que enfrente esté Chacarita indudablemente fue una motivación para el técnico en esto de volver a jugar con dos puntas bien definidos, aunque gran parte de esta decisión fue motivada por la forma de pararse y jugar del rival, al que, creen, se lo puede lastimar poniéndole un jugador cerca de Vismara para que el ex canalla no maneje el balón con tanta tranquilidad. Al menos desde la idea está clara la intención de «jugarlo más por el centro que por las bandas», según palabras del propio entrenador.

Del medio para atrás hubo también un cambio, pero los desplazamientos posicionales fueron muchos más. Varios jugadores que actuaron en una posición contra Vélez ahora lo harán en otro lado. Algunos fueron del centro hacia la izquierda, otro (Fernández) desde la izquierda hacia adelante.

El regreso de Tobio se caía de maduro. No precisamente por el presente del defensor, sino porque era la chance de volver a ponerle un poco más de orden a la última línea en lo que a perfiles se refiere. Oscar Cabezas y Alfonso Parot fueron los puntos más altos de equipo en el último partido y por eso el técnico los mantuvo en cancha, aunque moviéndolos un poco.

El colombiano ayer fue el segundo marcador central (donde más cómodo se siente por su condición de zurdo), mientras que el chieno fue el otro que pareció ganarse un lugar por lo hecho en Liniers. Fue así que el DT lo corrió de la posición de segundo marcador central a marcador de punta por izquierda. ¿Y Fernández? Fue el que movió un casillero hacia adelante. Volvió a la posición que más conoce y en la que en este último tiempo se había desempeñado poco y nada (ver aparte).

Y después, lo dicho. Carrizo tuvo que conformarse con hacer fútbol para el alternativo, al igual que Maxi González. Justamente el volante central siempre fue titular con Leo Fernández. El único partido que no estuvo en cancha desde el inicio fue frente a Huracán, pero no por una decisión de corte táctico, sino porque debía cumplir una fecha de suspensión.

Dos cambios: Tobio por Maxi González y Herrera por Carrizo, las cartas fuertes que se jugará Leo Fernández mañana contra Chacarita. Claro que no menos importante es lo que hace a la cuestión táctica. Porque la apuesta de un esquema con enganche también tiene lo suyo. (La Capital)