Así sí: Hubo festejos sin conflictos en parques de la ciudad

La zona oeste fue uno de los lugares más custodiados. Los bailes se mudaron al río y a la plaza Buratovich

Muchos barrios volvieron a celebrar Año Nuevo en la calle. Durante la madrugada del primer día del año, los operativos preventivos realizados por personal de la Secretaría de Control y Convivencia del municipio y agentes de la policía provincial evitaron los cortes de calle en una decena de esquinas. No obstante, hubo festejos masivos en el parque de las Colectividades, en la plaza Buratovich, de 9 de Julio y San Nicolás, y en Alem y Ocampo donde, a diferencia de lo ocurrido en Navidad en la zona oeste, «no hubo conflictos con los vecinos», destacó el titular del área de Control municipal, Guillermo Turrín.

Entre agentes municipales y policías, unos 250 efectivos participaron de los operativos para evitar incidentes durante Año Nuevo. Y gran parte de este personal estuvo afectado a prevenir incidentes en las numerosas convocatorias realizadas por las redes sociales a participar de festejos callejeros durante la madrugada del primer día del año.

Barrio Azcuénaga fue una de las zonas particularmente custodiadas. Los festejos de Navidad en la plaza que lleva el nombre del vecindario, en Camilo Aldao entre Mendoza y San Juan, habían convocado a unas 2 mil personas, cortando el tránsito y disparando la furia de los vecinos.

Para Año Nuevo, el lugar de convocatoria pautado era a unas cuadras de allí, en Mendoza y Teniente Agneta. Pero casi sobre la hora del brindis, gran cantidad de efectivos del Cuerpo de Guardia de Infantería se apostaron en el cruce de ambas calles y disuadieron el festejo.

Con cascos y escudos, los efectivos llegaron sobre las 12 y permanecieron hasta las primeras luces del día, según contaron los vecinos del barrio.

Pese a la presencia policial, «se acercaron muchos grupos de chicos, pasaban como para ver qué onda y se iban para otro lado», contó ayer una mujer que vive a 30 metros del lugar. «En ningún momento se repitió lo vivido en Navidad», destacó y apuntó que «no hubo conflictos con la policía».

Bajo custodia

La esquina de Mendoza y Teniente Agneta no fue la única bajo custodia durante la madrugada del 1º de enero. El secretario de Control y Convivencia municipal señaló que los operativos conjuntos realizados entre el municipio y el Ministerio de Seguridad de la provincia se desarrollaron en una decena de espacios, como San Juan al 5200 y San Luis y Gutenberg, en la zona oeste.

En el distrito norte, los efectivos se apostaron en Don Bosco y Casilda, Díaz Vélez y Carrasco, Tuella y avenida del Valle, Avellaneda y Génova, Cordiviola al 300; y más al centro en Iriondo y 9 de Julio.

En todos estos lugares, destacó el funcionario, durante los festejos de Navidad se recibieron quejas de los vecinos por ruidos molestos, corridas o problemas relacionados al excesivo consumo de alcohol.

Para el funcionario, los festejos callejeros durante las fiestas de fin de año son un fenómeno cada vez más extendido en la ciudad. «Desde el punto de vista sociológico habría que preguntarse por qué los jóvenes y no tan jóvenes eligen celebrar en la calle», apuntó y explicó que la intervención de los agentes municipales «busca armonizar el derecho a festejar con el derecho a descansar o circular libremente».

A manera de ejemplo, apuntó que hubo por lo menos otras tres convocatorias masivas que se desarrollaron sin conflictos. Una de ellas fue en el parque de las Colectividades, donde se juntaron unas mil personas. «Los asistentes se quedaron en el parque hasta las seis de la mañana», sostuvo y aclaró que «lo que se busca persuadir no es la fiesta en sí, sino las situaciones de choque con los derechos de los vecinos».

Otro tanto, sostuvo, sucedió en la plaza Buratovich, donde también miles de personas se juntaron para festejar en la Navidad. Ayer también hubo conga, «aunque sin corte de calle y con mucha menos pirotecnia», apuntó Turrín.

Alem y Ocampo, en las inmediaciones del parque Irigoyen, fue otro de los lugares donde la velada se extendió hasta altas horas. (La Capital)