Renunció el jefe de ministros de Brasil en medio de acusaciones de corrupción

El ministro brasileño de la Presidencia, Antonio Palocci, dimitió este martes al cargo acorralado por un escándalo surgido tras conocerse que su patrimonio aumentó veinte veces en los últimos cuatro años, informaron fuentes oficiales.

Palocci, considerado como el principal ministro del gabinete de Dilma Rousseff, defendió la legalidad de sus actos y argumentó que ha decidido apartarse porque la polémica «podría perjudicar sus atribuciones» dentro del Ejecutivo, según un comunicado difundido por el Gobierno.

La dimisión fue aceptada por la presidenta Dilma Rousseff, quien designó para ocupar la vacante que deja Palocci a la senadora Gleisi Hoffman, del Partido de los Trabajadores (PT).

La renuncia se produce un día después de que el procurador general de la República, Roberto Gurgel, decidiera archivar las peticiones de la oposición de que se abriera una investigación sobre el aumento del patrimonio de Palocci por no hallar indicios de delito.

El diario Folha de São Paulo denunció que el patrimonio de Palocci se multiplicó por veinte en los últimos cuatro años, cuando era diputado y dirigía una consultora.

El ministro aseguró hoy, en la nota de dimisión, que el dictamen del procurador general «confirma la legalidad y la rectitud» de sus actividades profesionales y la «inexistencia de cualquier fundamento» en las alegaciones presentadas en su contra.

«La continuidad del embate político podría perjudicar sus atribuciones en el Gobierno, por lo que (Palocci) prefirió solicitar su alejamiento», concluye el comunicado difundido por el Gobierno.

En su dictamen, el procurador argumentó que la ley penal no tipifica como delito la incompatibilidad entre el patrimonio y la renta declarada.

El rotativo Folha de Sao Paulo aseguró que en 2010, cuando Palocci además de diputado coordinaba la campaña electoral que llevó al poder Rousseff, facturó a través de su consultora unos 20 millones de reales (12,5 millones de dólares).

Ante la presión de la oposición, Palocci concedió una entrevista al canal de televisión Globo en la que desmintió haber incurrido en tráfico de influencias o actuado en situación de conflicto de intereses durante sus labores como consultor.

El funcionario reconoció haber facturado los valores aireados por la prensa pero rechazó hacer público el nombre de los clientes.

Palocci había sido ministro de Hacienda del Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva entre 2003 y 2006, cuando también se vio obligado a renunciar en medio de un escándalo de corrupción con tintes sexuales, por el que llegó a ser juzgado y finalmente fue declarado inocente. (Rosario 3)