El Canalla perdió frente a Racing y el «Kily» quedo en la cuerda floja

El conjunto rosarino cayó ante el de Juan Antonio Pizzi por un frentazo de Enzo Copetti a los 18 del segundo tiempo. En un partido muy pobre, el acierto de los de Avellaneda fue la diferencia.

Rosario Central perdió ante Racing en Avellaneda por 1 a 0. El equipo del Kily González no le encontró la vuelta al partido y, si bien tuvo chances de empatarlo en un par de centros del final, no hizo méritos para lograrlo.

El canalla acumula tres partidos sin victorias, tras el debut promisorio ante Argentinos Juniors. Ante Racing nunca tuvo el control del partido y ni siquiera logró generar peligro serio sobre el arco rival.

En el primer tiempo, Racing se hizo dueño del trámite, pero tampoco imponía supremacía clara en la primera media hora de juego. Y cada vez que se acercaba al área canalla aparecía Gastón Ávila para resolver los problemas del fondo.

Para el segundo tiempo, Central sufrió la salida de Gastón Ávila, el mejor del fondo, por un fuerte dolor en el hombro. Eso obligó a que Kily González mande a la cancha a Nicolás Ferreyra. Y aunque esta vez el DT hizo los cambios que tenía que hacer (mandó a la cancha a Marinelli y a Pupi Ferreya por Zabala y Gamba), el resultado le daría la espalda.

A acción seguida, Racing se encontró con la apertura del marcador. A los 18 del complemento, de cabeza, Enzo Copetti ganó en el área de Central tras un córner y puso el partido 1 a 0 para los de Avellaneda.

Los quince minutos del final pueden tranquilamente servir como maquillaje de un rendimiento que, una vez más, contó con deficiencias. Porque ese Central de último tramo del partido tuvo poco y nada que ver con el de los primeros 75 minutos, en los que las ideas carecieron, algunos errores se repitieron, la impotencia volvió a hacerse carne en medio de un deambular cansino, donde la estructura original se vio rápidamente alterada. Sólo por esa imagen de los minutos finales es que alguien podría pensar en que hubo un merecimiento no correspondido, pero en el análisis global, el que corresponde, Central claramente se acordó tarde de jugar y por eso a este Racing cabizbajo de Pizzi le alcanzó una jugada esporádica para ganar el encuentro. Otro flojo partido y nueva derrota.

Central es un conjunto de voluntades dispersas, con algo de orden y salida prolija desde el fondo, pero muy poca creatividad en el medio y sin peso en ataque. Y si Pizzi estaba en la cuerda floja, ni hablar del Kily González, un referente canalla que no logró sostener los niveles de la Copa Diego Maradona.