Boca la embocó sobre el final y dejó sin nada a Newell’s

Si tenía que haber un ganador en el parejo choque que protagonizaron este domingo Newell’s y Boca, era el segundo. Y la balanza se inclinó sobre el final para el Xeneize, que se impuso por 1-0 con un gol de Pablo Mouche a los 42 minutos del segundo tiempo en el Coloso del Parque, y se afianza como candidato. La Lepra sigue sin ganar en el Apertura.

Era uno de esos duelos que aceleran el pulso y que se empiezan a jugar en la imaginación de los hinchas desde varios días antes. Con condimentos picantes como el regreso de Rolando Schiavi al Coloso, la presencia de Juan Román Riquelme y la euforia de dos hinchadas masivas y seguidoras, que vibraron con un buen partido.

En la mitad inicial se repartieron la posesión del balón y también las posibilidades de gol. Primero fue Boca el que sacó ventaja en el ping pong, con Lucas Viatri y Darío Cvitanich muy activos y ganando casi todo lo que les tiraron. La falta de puntería y la buena tarde de Sebastián Peratta mantenían el arco local en cero.

Pero el Rojinegro niveló el encuentro en cuanto a las llegadas con peligro, con Mauricio Sperduti como abanderado. Agustín Orión también intervino bien para salvar a su equipo en un par de oportunidades.

El complemento mostró más decidida a la visita, que, un tanto lejos de los destellos de buen fútbol mostrados ante Unión, intentó de todas formas jugar por abajo y asociado, y comenzó a arrinconar de a poco a Newell’s.

Sin embargo los dirigidos por Javier Torrente se las ingeniaban para llevar cada tanto el peligro hacia el otro extremo del campo, sobre todo a través de las subidas por izquierda de Cristian Díaz.

Amesetado desde la mitad de la segunda etapa, el partido parecía encaminarse a un empate que de alguna forma dejaba conformes a ambos, pero Julio Falcioni acertó con el sacudón que le dio al equipo desde el banco. Y el ingreso de Mouche resultó determinante.

El delantero recibió una buena habilitación de Viatri cuando al partido le quedaba casi nada y definió cruzado al segundo palo, bien esquinado, lejos del alcance de Peratta, para desatar el delirio de los miles de hinchas auriazules presentes en el Marcelo Bielsa. Que vieron ganar a su equipo en Rosario después de algunos años.

La Lepra, por su parte, no logró aún sumar de a tres en el presente campeonato, donde sólo acumula dos unidades y comienza a perder terreno en la tabla. (Rosario 3)