Newell´s empató con Tigre, pero sigue líder

A pesar de haber contado con las mejores chances, los de Rosario igualaron 0 a 0 con el Matador en Victoria.

Por los exacerbados niveles de histeria que recorren al fútbol argentino, es difícil que un resultado sea asimilado con mesura y puesto en perspectiva por los dos equipos, sin dejarse llevar por el tremendismo. Motivos para que irrumpa la ansiedad siempre abundan. Ni Newell’s ni Tigre quedaron plenamente satisfechos por el empate, pero en el 0-0 los dos encontraron algunas señales promisorias, que les permiten ilusionarse con lo que está por venir. Sin embargo, gracias al empate de Boca y a la derrota de Vélez, el equipo de Rosario pudo conservar la vanguardia.

Tigre sigue sin ganar en nueve fechas, y pese a los insistentes rumores sobre la desvinculación de Arruabarrena, el equipo mostró compromiso y arrojo para sacar la cara por su técnico, aun con un material bastante más escaso (ya no están Román Martínez, Luna y «Cachete» Morales) del que había en el semestre anterior.
Así están las posiciones del torneo Inicial
A Newell’s, sobre todo en el primer tiempo, se le escapó un triunfo que hubiera venido a respaldar su más que interesante proyecto de juego, bastante diferente de lo que es el denominador común de la competencia local. Porque este Newell’s apuesta a tener la pelota el mayor tiempo posible, a dominar los desarrollos desde la posesión y una circulación que lo ponga en campo contrario con no menos de seis futbolistas, entre los cuales siempre está esa línea de cuatro volantes intermedios y la proyección de alguno de los laterales. No sólo lo intenta en el Parque de la Independencia, sino que trajo su ambiciosa propuesta a Victoria, donde obligó a que Galmarini y Leone hicieran más de laterales que de volantes con salida. Si Newell’s no ganó no fue porque le faltó audacia o sucumbió a la presión de verse en la punta (siempre sin descuidar su promedio del descenso), sino porque no aprovechó su superioridad en los primeros 45 minutos y porque Scocco, que venía siendo implacable en la definición, falló en tres situaciones muy favorables a metros del área chica. Como si hubiera extraviado la serenidad y puntería que lo exhibían como uno de los mejores delanteros del torneo.También quedaron un cabezazo de Maxi Rodríguez en las manos de García y una derechazo de Tonso en un poste.

Martino dijo en la semana que su experiencia con Paraguay en un Mundial y un par de copas Américas lo liberó para diseñar planteos más arriesgados de los que se le veían con el conjunto guaraní. No es que asumió en un contexto desprovisto de exigencias y responsabilidades para hacerse el lírico o el romántico. Lo fueron a buscar porque la sombra del descenso era cada vez más grande. Y además arriesgó que su nombre de leyenda que representa para Newell’s se sometiera al impiadoso escrutinio del resultado de cada fin de semana.

Bienvenida la búsqueda de Martino porque este Newell’s es bastante estilizado. No le sobra virtuosismo, pero la idea de pasarse la pelota tiene como punto de partida al buen pie y criterio de Bernardi, y continua en la movilidad de compañeros que ocupan el ancho de la cancha y se ofrecen como receptores. Newell’s no tira pelotazos para dos delanteros que fijan su posición cerca del área, sino que elabora e intenta llegar desde tres cuartos de cancha con jugadores que no dan referencias estáticas a sus marcadores. Tigre tomó precauciones y armó una defensa de cinco, con Orbán saliendo a anticipar unos metros más adelante del área.

Tigre no sólo resignó poderío ofensivo después del receso, sino que en defensa se volvió mucho más vulnerable. Ayer evitó recibir goles por primera vez en el torneo. Además del correcto trabajo de los centrales y de la sacrificada función de Leone en la recuperación de la pelota, también influyó la mejoría del arquero García, que en una autocrítica reconoció que estaba en deuda. Ayer estuvo firme, siempre bien colocado y no dio rebotes. De tan metido que estaban en el partido discutió fuerte con Echeverría por desentenderse en un cierre. No se puede decir lo mismo de Guzmán, que, si bien no fue muy exigido, comprometió a su equipo con dos malas salidas a cortar sendos tiros libres.

Una disminución física en una rodilla acentuaba la lentitud que ya es natural en Castaño. Al juvenil debutante Menossi se le estaban haciendo largo los 90 minutos. Arruabarrena actuó rápido y refrescó la zona con el uruguayo Ferreira y Gastón Díaz, y también dotó al ataque de más chispa y verticalidad con Pérez García por Botta. Por el contrario, Martino no pudo mejorar con los cambios a un Newell’s que ya no era tan fluido ni compacto. Tigre preocupó con algún contraataque y un centro de Ftacla que dio en el travesaño. De a pequeños pasos, Newell’s y Tigre igual pudieron subir.(La Nación)