Paraguay: el Congreso destituyó al presidente Lugo

En un juicio político veloz, el ex mandatario fue alejado del cargo por mal desempeño de sus funciones; adelantó que presentará un recurso de inconstitucionalidad ante los organismos internacionales

ASUNCION.- El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, fue destituído por «mal desempeño de sus funciones» y «comisión de delito», principalmente como consecuencia de su actuar en el choque entre campesinos y policías que la semana pasada dejó 17 muertos.

Lugo fue destituído de su cargo de presidente de Paraguay, en una votación que arrojó 39 votos a favor de su salida del cargo y cuatro en contra. En su lugar asumirá el hasta ahora vicepresidente Federico Franco.

Los abogados de Lugo afirmaron que ante la destitución acudirán a la Corte Interamericana de Derechos Humanos porque «el plazo de dos horas para defenderse es inconstitucional». El plazo normal para preparar la defensa en cualquier litigio judicial es de 18 días».

La gravedad del anuncio y la celeridad del juicio tomaron por sorpresa a los paraguayos y movilizaron a miles de partidarios y detractores de Lugo al centro de la capital, donde los bandos se manifiestan a la espera del desenlace del proceso.

La Cámara de Diputados resolvió ayer solicitar al Senado el juicio político de Lugo por 76 votos a favor, uno en contra y tres ausencias, en un demoledor consenso de legisladores oficialistas y opositores. Ahora, los senadores, que aceptaron la solicitud ayer por la tarde, llevarán adelante un juicio que se resolverá hoy mismo y en el que Lugo tendrá apenas dos horas para presentar su alegato y tratar de revertir una sentencia que muchos dan por descontada.

En tanto, Luis Samaniego, uno de sus abogados defensores, anticipó hoy que Fernando Lugo presentará un recurso de inconstitucionalidad contra el juicio político que lleva adelante el Congreso. Argumentó que este recurso obedece al hecho de que el Congreso «no respetó el debido proceso» y el Poder Judicial debería suspender el juicio.

En un proceso inéditamente rápido el juicio buscó determinar si el mandatario incumplió sus funciones al permitir una mayor conflictividad social en el país, que tocó su punto máximo el viernes pasado con el enfrentamiento desatado a partir de un desalojo. La mayoría de los senadores encontraron a Lugo culpable y lo destituyeron de la primera magistratura de Paraguay.

Otros cargos

Los legisladores dicen que Lugo, a quien le faltaba poco más de un año para terminar su mandato, no reaccionó como debía ante la masacre de la semana pasada. Pero también lo acusan de temas menos rotundos durante su gobierno como haber apoyado un mitin de jóvenes socialistas en un predio de las Fuerzas Armadas o no haberse mostrado decisivo en combatir al pequeño grupo armado Ejército del Pueblo Paraguayo, responsable de asesinatos y secuestros durante la última década, la mayor parte de ellos antes de que asumiera.

«Me están haciendo un golpe de Estado express porque lo han hecho entre noche y madrugada, se han puesto de acuerdo, nosotros decimos que es incluso anticonstitucional porque no se respeta el debido proceso», denunció Lugo, de 61 años, en una entrevista anoche con la cadena de televisión Telesur. «Mañana (por hoy) ojalá que reine la racionalidad en los parlamentarios y que el presidente Lugo realmente pueda salir airoso de este juicio político injusto que es sometido hoy por el Congreso Nacional», agregó.

Una mandato signado por complicaciones

Nacido el 30 de mayo de 1951 en San Pedro del Paraná, sur de Paraguay, Lugo pertenece a una familia humilde que se opuso a la dictadura de Alfredo Stroessner. Se ordenó sacerdote en 1977 y fue nombrado obispo por Juan Pablo II en 1994.

El mandatario, con el bastón presidencial, en su asunción. Foto: Archivo Tras renunciar a sus cargos y condición religiosa, Lugo se volcó a la política y en abril de 2008 ganó la presidencia del país. A poco de asumir, el mandatario se distanció de su vicepresidente, Federico Franco, enfrentamiento que se mantiene hasta la actualidad.

En abril de 2009 reconoció ser padre de un chico de 2 años y su popularidad se derrumbó. Hace 15 días aceptó la paternidad de su segundo hijo. Y como si ello no fuera suficiente, en agosto de 2010 le detectaron un cáncer linfático que fue tratado en Brasil, tras lo cual en enero pasado le diagnosticaron «remisión completa».

Y el desenlace de este mandato marcado por las complicaciones se produjo el 15 de este mes, en un sangriento y confuso enfrentamiento en el que murieron 11 campesinos de un movimiento de «sin tierra» próximo a Lugo y seis policías. Al día siguiente del choque, Lugo reemplazó al ministro del Interior Carlos Filizzola y ordenó que una comisión especial investigara la violencia, con la asistencia de la OEA. La decisión presidencial no logró detener la crisis.

Agencias EFE, AP y Reuters